El pleno del Congreso retoma este martes su normal actividad tras la fallida investidura de Pedro Sánchez, pese a continuar con el Gobierno en funciones. Y lo hace con dos iniciativas, una del PP y otra de Ciudadanos, sobre la “unidad de España” que buscan algo muy similar: que la Cámara deje claro su apoyo a la Constitución y la soberanía nacional y rechace el proceso independentista abierto en Cataluña. El debate se espera tenso ante el choque de trenes que se dará con Podemos y los partidos nacionalistas e independentistas.
El PSOE no tiene dudas de su defensa de la unidad de España y de la Constitución. Sin embargo, la reunión que Pedro Sánchez va a mantener este martes con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha levantado suspicacias en las filas de Ciudadanos. El encuentro, que se celebra a petición del líder del PSOE, tendrá lugar por la mañana, a escasas horas de que comience el debate en el Congreso. Los dirigentes de Ciudadanos ya han advertido a Sánchez de que romperán su pacto si habla del referéndum con Puigdemont. La importancia que le dan a este tema en la formación naranja se demuestra por el hecho de que será el propio Albert Rivera quien subirá a defender la posición de su grupo.
Por parte del PP será la diputada por Barcelona Dolors Montserrat la encargada de defender la propuesta de su grupo que insta al conjunto de las instituciones españolas “a mantener la defensa, desde la legalidad constitucional, de la soberanía nacional, el Estado de Derecho, la democracia y la convivencia entre los españoles”.
La de Ciudadanos tiene un objetivo casi idéntico, “la defensa de la democracia, la igualdad y la unión de todos los españoles” y fue registrada poco después de arrancar la legislatura, antes que la de los populares. En realidad, la intención de los dos partidos era forzar a “retratarse” sobre este asunto a Podemos, que defiende la celebración de un referéndum para que el pueblo catalán pueda decidir si quiere o no la independencia y dejarles así “en evidencia”, equiparándoles con los independentistas.
Pero ese inesperado encuentro de Sánchez con el presidente de la Generalitat ha hecho saltar las alarmas en Ciudadanos, que se enteraron de la cita por los medios de comunicación. El secretario de Comunicación, Fernando de Páramo, no tardó mucho en advertir a Sánchez de que darán por roto el pacto de investidura si plantea al presidente catalán alguna fórmula que abra la posibilidad de que se celebre en el futuro un referéndum sobre la independencia a cambio de que abandone la vía de la “desconexión” de España.
Los socialistas niegan que Sánchez vaya a la cita con esa intención y aseguran que va para hablar de la situación política “en general” y también a estudiar los 23 puntos que Artur Mas envió a Mariano Rajoy hace dos años, entre los que había medidas para aliviar la delicada situación financiera de la Generalitat o propuestas en lengua, cultura e infraestructuras.
Precisamente, Rivera recordará en su intervención los motivos con los que justifican la presentación de su propuesta. El principal, que “el Gobierno autonómico de Cataluña ha anunciado su intención de incumplir las leyes democráticas y las resoluciones de los tribunales” con la intención de “separar a los catalanes del resto de españoles”. Una decisión que según la formación de Albert Rivera, “da la espalda a la mayoría de los catalanes que en las pasadas elecciones votaron mayoritariamente a favor de la unión, la solidaridad y la igualdad de todos los españoles”.
Los dirigentes de Ciudadanos sostienen que “ningún parlamento, gobierno ni ninguna otra institución puede desobedecer las leyes democráticamente aprobadas, ni las resoluciones de los tribunales, ni situarse por encima de la soberanía nacional que corresponde al conjunto del pueblo español, y siendo responsabilidad del Gobierno de España velar por el cumplimiento de estos principios democráticos básicos”.
Por parte del PSOE, la encargada de defender la postura en el pleno será la secretaria de Estudios y Programas, y diputada por Madrid, Meritxell Batet. Los socialistas están preparando una enmienda a las dos PNL para introducir una referencia a la reforma de la Constitución que plantea el partido de Pedro Sánchez. El texto tiene que estar registrado antes de las doce del mediodía y antes esperan acercar posturas con sus socios, que van a analizar cualquier matiz que introduzcan y que ponga en duda su firmeza contra el referéndum.
En nombre de Podemos –salvo cambios de última hora– será el portavoz, Íñigo Errejón, el que suba a la tribuna, aunque se repartirá el tiempo de intervención con el representante de En Comú Podem, Xavier Domènch. La formación de Iglesias siempre ha defendido que Cataluña pueda convocar un referéndum para que su ciudadanía tenga derecho a decidir su futuro, lo que no significa que ellos sean un partido independentista. No obstante, votarán en contra de ambas PNL.
La “cerrazón” de Mariano Rajoy por no haber abordado hace tiempo este asunto para dar una solución al “conflicto” será criticada por todos los portavoces, aunque con diferentes argumentos. Especialmente por el PNV, Democracia y Libertad (DL) y ERC. Tanto Francesc Homs como Aitor Esteban, los portavoces de las dos formaciones nacionalistas, votarán en contra de las iniciativas. Al igual que el grupo republicano, que estará representado por Joan Tardá y Gabriel Rufián.