“No hay debate del estado de la nación porque Rajoy no puede ofrecer ningún logro social”
Margarita Robles (León, 1956) se incorporó al equipo de Pedro Sánchez como número dos de la candidatura. Tras imponerse en la batalla por el liderazgo, dio un giro al grupo parlamentario y la colocó como portavoz, una decisión que sentó mal en un sector crítico que permanece replegado. Atiende a eldiario.es en su despacho de la Carrera de San Jerónimo en el que, más allá de unas plantas, no ha hecho más cambios. A pesar de que dice que “en principio” quiere quedarse toda la legislatura al frente de la portavocía del grupo, no lo ha llenado. Evita hablar de una hipotética candidatura al Ayuntamiento de Madrid, que en privado descarta, y tampoco entra en la colaboración que inició sin mucho éxito con Unidos Podemos. Cree que el PSOE debe revindicarse en solitario como principal fuerza de la oposición. Tras la entrevista, Pablo Iglesias y Albert Rivera pactan impulsar la reforma electoral y Ciudadanos cambia de criterio sobre la prisión permanente revisable. Robles responde por teléfono.
Si tuviera que hacer una predicción de qué va a pasar en la política catalana, ¿cuál sería?
No me gusta hacer predicciones porque los políticos no estamos para hacer predicciones sino para dar respuesta a los problemas. Lo que quiero es que termine este esperpento, esta pesadilla que está viviendo Catalunya, que de una vez haya un presidente en la Generalitat que no elude la acción de la justicia, como es el caso de Carles Puigdemont y pasar página de algo que es muy malo para la sociedad catalana y que vivimos desde el 6 de septiembre. Catalunya no se merece estar pendiente de la decisión de un prófugo.
¿El 'no es no' a Rajoy es compatible con apoyar el 155 y la estrategia del Gobierno en la respuesta al desafío independentista?
Tiene que quedar claro que históricamente el PSOE ha sido un partido de gobierno y un partido de Estado. Hay que distinguir entre lo que son políticas de Estado y lo que no. Hay materias, como la lucha antiterrorista o la defensa de la legalidad y la Constitución, que son políticas de Estado. El PSOE, cuando hay una vulneración de la Constitución, lo que tiene que hacer es defender la legalidad y el ordenamiento vigente. Tiene que quedar muy claro que el PSOE intentó hasta el final que no se aplicara el artículo 155, que fue Puigdemont, con la decisión que tomó al final de no querer convocar las elecciones él, llevó a la aplicación del 155. Pero que nadie tenga ninguna duda de que el PSOE va a hacer siempre políticas de Estado en aquellas materias que lo exijan.
¿Se arrepiente de haber dicho que el PSOE no apoyaría el 155?el PSOE no apoyaría el 155
No, no me arrepiento en absoluto. Cuando se dice una cosa en un momento determinado es porque en aquel momento concreto la situación política era una situación que no llevaba a la aplicación del artículo 155. Desgraciadamente, desde el momento en que dije aquello, hubo una fuga hacia adelante por parte del independentismo, por parte de Puigdemont, y pasamos de una situación en la que todo era preocupante a una vulneración clarísima de la Constitución. Y cuando se produce una vulneración de la Constitución y del ordenamiento jurídico, la obligación de cualquier partido de Estado es preservar la Constitución. Si el artículo 155 se ha aplicado fue porque Puigdemont no quiso convocar elecciones.
¿Qué le parece que Carmen Calvo restara importancia al debate del estado de la nación porque no sirve para “conseguir nada”? ¿Coincide con ese criterio?
Cada uno tiene sus opiniones. El debate del estado de la nación lo puso en marcha Felipe González y creo que es una manifestación más de control democrático. Pero realmente en lo que nos tenemos que fijar no son en manifestaciones que pueden hacerse desde la oposición sino que este Gobierno en todo este periodo de sesiones ha boicoteado lo que podemos hacer en el Parlamento y está desde que no haya propuesto el debate de la nación, que llevemos vetadas 47 iniciativas de la oposición por parte del Gobierno, que se amplíen indefinidamente los plazos de enmiendas y lo que de verdad es preocupante es que haya un Gobierno que no gobierna, que con el pretexto de Catalunya ha dejado a un lado la agenda social.
¿Le preocupa a Pedro Sánchez que su voz quede desdibujada en ese debate por no tener escaño?
Pedro Sánchez tiene una presencia social absolutamente importante y fundamental, pero vuelvo a decir que en el debate del estado de la nación de lo que se trata es de que el presidente del Gobierno explique a los ciudadanos qué es lo que está haciendo. Entiendo que no hay debate del estado de la nación porque el señor Rajoy no tiene nada que explicar a los ciudadanos porque en esta legislatura, más allá de agarrarse a su sillón de presidente, no puede ofrecer ningún logro social. No se trata de lo que pueda decir la oposición sino que en este momento el Gobierno trata de eludir cualquier protagonismo del Parlamento y trata de eludir una dación de cuentas, entre otras cosas, porque desgraciadamente en políticas sociales tiene poco o nada que ofrecer.
Si se produce en primavera, como dice el Gobierno, a usted le tocará defender la postura del PSOE. Catalunya centrará parte del debate. Ustedes han renunciado, por ejemplo, a reprobar a la vicepresidenta. ¿Le preocupa que en ese debate el PSOE quede relegado a un segundo plano, que no pueda sacar la cabeza?
El debate del estado de la nación quien tiene que rendir cuentas de lo que está haciendo es el Gobierno y a la oposición lo que nos corresponde es controlar la labor del Gobierno. El debate del estado de la nación no supone un control a la oposición. En esta legislatura el PSOE es el partido que más proposiciones de ley está presentando en defensa de los ciudadanos que más lo necesitan y está haciendo verdaderas políticas de Estado. No caigamos en la trampa del PP: en el debate del estado de la nación corresponde al Gobierno dar cuenta de lo que está haciendo y, lamentablemente, este Gobierno no está haciendo ninguna política social para el día a día de los dependientes, los parados, los estudiantes, las mujeres...
Hay muchos ejemplos, como que al presidente del Gobierno parece que la brecha salarial no va con él o que todavía no se haya realizado un decreto ley para los 200 millones que corresponden al plan para la lucha contra la violencia de género que el propio Gobierno se comprometió a ello. Vivimos con un Gobierno que no hace y, además, incumple y es él el que tiene que dar cuenta en el debate del estado de la nación. Esto no es un examen del PSOE, ojalá en su momento Pedro Sánchez hubiera sido presidente y la situación en España y en Catalunya sería diferente.
El PSOE ha descartado una moción de censura. Hasta que no haya unas elecciones Pedro Sánchez no va a tener la oportunidad de ser presidente. ¿Descarta una moción de censura instrumental?
La política es una cosa muy seria. Me he incorporado porque está para resolver los problemas de los ciudadanos, no para hacer representaciones teatrales. Cuando una moción de censura ha fracasado recientemente como ha fracasado, no tiene ningún sentido volver a llevar al país a una situación de tensión cuando todo el mundo sabe que esa no es la cuestión. Sería muy bueno que algunos dirigentes políticos empezando por el presidente del Gobierno y siguiendo por Albert Rivera dejaran de hacer política meramente show y de fotos. Los ciudadanos están hartos ya de tantas fotos y de tantas performance. Lo que quieren son soluciones. No me gusta la política que únicamente quiere titulares y fotos.
En este momento no, pero ¿cuándo se acerque el ecuador o el fin de la legislatura puede ser?
Tenemos que vivir el día a día. Nuestra obligación como personas que prestamos servicio en la política es dar respuesta a los problemas y no buscar otros escenarios que lo que hagan sea salvar esa ineficacia en este momento está teniendo el Gobierno.
Usted dijo que el informe del Consejo de Estado en contra de impugnar la investidura de Puigdemont era un varapalo. ¿Qué le parece que el Gobierno siguiera adelante y presentara el recurso ante el Constitucional?
Apoyamos al Gobierno en la defensa de la Constitución y del ordenamiento jurídico. Después el Gobierno es el que gobierna y tendrá que saber los resortes jurídicos que utiliza. Es evidente que el Consejo de Estado que es un órgano consultivo le puso pegas a la actuación del Gobierno. Al final serán los ciudadanos los que tendrán que decir la última palabra; pero estoy absolutamente de acuerdo con lo que decía Pedro Sánchez: precisamente porque estamos apoyando al Gobierno en cuestiones de Estado, le pedimos al señor Rajoy que gobierne y que haga cosas, que lo haga en la agenda social, en el tema de Catalunya y que ya vale de una legislatura, que como decía Fernández Vara, huele a formol porque el Gobierno se ha empeñado en paralizarlo todo.
Me cuesta entender cómo se pasa de decir que fue un varapalo a que...
Cuando jurídicamente uno pide un informe y no le dan la razón, se le puede llamar varapalo o como se le quiera llamar. Pero hay un órgano consultivo de este país que ante una petición de informe del Gobierno le dice que no procede esa petición que hace el Gobierno. A partir de ahí, cada uno que lo llame como quiera, pero hay un hecho real que es que el Consejo de Estado hizo un informe que no sostenía la pretensión del Gobierno.
Y de ahí que el Tirbunal Constitucional no le diera la razón al Gobierno aunque sí que se pronunció en contra de la investidura a distancia de Puigdemont. ¿Esta decisión del Constitucional qué le parece?
Por deformación profesional creo que es muy importante que desde la política se respeten siempre las decisiones de los tribunales. La crítica a las resoluciones judiciales es un logro democrático, pero entiendo que desde las fuerzas políticas tiene que haber siempre un respeto a las decisiones judiciales.
Tras su definición de varapalo a la decisión del Consejo de Estado. Pedro Sánchez pidió no polemizar. ¿Va Margarita Robles por libre?
Eso no es una polémica, es una realidad. Se le puede llevar varapalo, contradicción... Cuando se pide un informe y el Consejo de Estado dice lo que dice no es ir por libre, es un hecho objetivo, eso no es una valoración. La prueba de que no se está polemizando es que hay un compromiso no con el Gobierno sino con la defensa de la legalidad.
Lo que pasa es que cuando la vicepresidenta anunció la petición de un informe al Consejo de Estado para luego recurrir al Constitucional, Pedro Sánchez dijo que apoyaba esas medidas. Entonces, sí tenían el ok del PSOE...
Pero para llegar a medidas políticas hacen falta instrumentos jurídicos. El Derecho es opinable, como todo, pero es evidente que el Consejo de Estado dijo lo que entendió que tenía que decir. El debate no es en las cuestiones jurídicas, que no nos corresponde a quienes estamos en política, sino el debate en su caso sobre cuestiones políticas. El PSOE va a estar siempre defendiendo el ordenamiento constitucional.
¿Le consultó Pedro Sánchez su opinión sobre ese visto bueno a que el Gobierno diera pasos hacia el Consejo de Estado y el Constitucional?
Las decisiones jurídicas el corresponden exclusivamente al Gobierno. El PSOE apoyará las decisiones políticas, las jurídicas no le corresponde a ningún partido de la oposición. Cuando el PSOE llegue al Gobierno, que espero que sea pronto, entonces tomará las decisiones jurídicas como instrumento para decisiones políticas.
¿Se ve como ministra?
No me veo como nada. Llevo muchos años como servidora pública, empecé a trabajar con 23 años y lo único que me importa es prestar un servicio a los ciudadanos. Por eso cuando veo que en política se habla de un gran titular o de una foto, yo no lo comparto. Creo mucho más en la política callada, con menos fotos y menos titulares, en la política de calle que piensa en lo que le importa a los ciudadanos en el día a día.
¿Tiene previsto a día de hoy ser portavoz parlamentaria toda la legislatura?
En la vida no se pueden hacer cálculos nunca de nada. Lo único que puedo decir es que me siento muy orgullosa de ser portavoz del grupo parlamentario socialista. Tenemos un equipo de diputados que están trabajando muy bien. Somos el partido que más propuestas está haciendo. Para mí, como una persona progresista, es un auténtico honor ser portavoz del grupo.
¿Y si le piden ser candidata al Ayuntamiento de Madrid?
Creo que ese es un debate que no toca en este momento. Falta mucho tiempo para eso. Mi compromiso es en este momento con el grupo parlamentario socialista. Lo que sí que creo que de verdad es que España necesita un cambio de Gobierno. En Madrid haría falta un alcalde o una alcaldesa socialista.
No me ha dicho que no.
Creo que no es ese tema de debate. Estoy absolutamente comprometida con mi trabajo como portavoz parlamentaria en el que cuento con el apoyo de los diputados, me siento orgullosa y en este periodo de sesiones hay muchas cosas por hacer sobre todo porque nos encontramos con un Gobierno que no hace, que no está pendiente de los ciudadanos y esa ineficacia estamos intentando salvarla o por lo menos denunciarla.
¿Por qué dejaría de ser portavoz parlamentaria?
En principio por nada. Yo estoy muy cómoda como portavoz y creo que en este momento no es el debate más que vivir cada día, hacer el trabajo de cada día y tenemos un periodo de sesiones absolutamente apasionante y un momento político muy difícil, con una agenda social inexistente por parte del gobierno y con una problemática en Catalunya que exige todo el esfuerzo y toda la dedicación. El PSOE es una pieza clave en la resolución de los problemas que tiene España.
Si el PSOE, más allá de la candidatura a la alcaldía de Madrid, le ofreciera otro puesto institucional, ¿lo aceptaría o solo se ve como portavoz?
Yo me incorporé al proyecto de Pedro Sánchez porque creía que era el proyecto que más posibilidades tiene para cambiar España en clave progresista y sigo creyendo que España necesita un Gobierno en clave socialista que continúe las transformaciones sociales que en su momento hicieron Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero. Ese es mi compromiso: que España pueda tener un Gobierno progresista porque creo que va a ser el que mejor resuelva los problemas de los ciudadanos.
Pedro Sánchez se reunió con la dirección parlamentaria para marcar la hoja de ruta del grupo para este periodo de sesiones. ¿Cuál va a ser la línea de actuación?
La que tenemos hasta ahora: denunciar la inacción del Gobierno y hacer propuesta de contenido social porque para nosotros temas como las pensiones, la educación, la brecha salarial son temas prioritarios y ahí vamos a seguir cada día haciendo propuestas y exigiendo un control del Gobierno.
Ustedes quieren llevar una proposición de ley para regular la eutanasia en la que el partido ya ha avanzado. ¿En qué consistirá su propuesta?
Se está trabajando en ello. Vamos a esperar a que quienes están trabajando en ese texto lo tengan ultimado para hacer la presentación. Hay una cosa importante del trabajo parlamentario es que exige rigor y seriedad y más en temas de esta trascendencia.
Votaron en contra de la propuesta de Unidos Podemos para despenalizar la eutanasia. No sé en qué puede cambiar para que ustedes ahora lleven una al Congreso...
No nos corresponde juzgar las propuestas de otros grupos políticos. En su momento hicimos una valoración y llegamos a la conclusión de que nuestra posición era no. El PSOE, como partido líder de la oposición, en temas tan importantes tiene que tener sus propias posiciones con el respeto obviamente a las posiciones de otras fuerzas políticas con las que, en otras ocasiones, habrá que colaborar.
¿Por qué no se apoyó la toma en consideración de esa proposición y, a partir de ahí, se planteó el planteamiento del PSOE?
Con todo el respeto, creemos que la propuesta del PSOE es más adecuada a las necesidades sociales y científicas en este momento.
¿Cuáles son los cambios respecto a la otra?
Cuando llegue el momento y cuando hagamos la presentación. La política no la podemos entender como una competencia a ver quién llega primero, a ver qué grupo parlamentario es el que presenta una proposición... No se trata de una carrera a ver quién llega primero ni de ir mirando por el retrovisor a ver lo que hacen los demás grupos. El Grupo Socialista está trabajando con seriedad, con rigor, lo está haciendo en las propuestas de ámbitos sociales y en eso vamos a seguir sin entrar en competición con nadie ni compararnos con nadie. Tenemos un compromiso con nuestros votantes y tratamos de hacerlo lo mejor posible.
¿Qué le parece el endurecimiento de las penas y el mantenimiento de la prisión permanente revisable que propone Ciudadanos?
No lo he visto, pero lo que le pido a Ciudadanos es que deje de dar bandazos y aclare de una vez cuál es su posición sobre la prisión permanente revisable.
¿Qué le parece que Pablo Iglesias y Albert Rivera quieran un pacto para reformar el sistema electoral?
En el pacto de investidura de PP y Ciudadanos ya está contemplado. No entiendo por qué pese a que hay una subcomisión en el Congreso, y pese a que tiene ese pacto, Ciudadanos no le exige cuentas al PP. Quienes más iniciativas estamos haciendo en el tema de reforma electoral somos el PSOE con el tema del voto rogado o de los dependientes.
¿Pero el PSOE está dispuesto a estudiar una mayor proporcionalidad en el sistema electoral?
Siempre estamos dispuestos a abrir vías de diálogo, pero entendemos que ya está abierta en la subcomisión del Congreso.
Sobre la colaboración. ¿Tiene en mente recuperar la mesa de colaboración parlamentaria con Unidos Podemos que anunciaron en verano?
Bueno, vamos a ver lo que va surgiendo. Cada vez que se ha presentado una propuesta de carácter social por los partidos de la oposición, tanto por el PSOE como por Unidos Podemos, nos hemos encontrado con el veto del Gobierno. Llevamos 47 proposiciones de ley de contenido social vetadas por el Gobierno. A partir de ahí es muy difícil que pueda haber una dinámica parlamentaria de colaboración con ninguna fuerza política porque el trámite previo es el veto que nos pone el Gobierno.
¿Que no haya habido más reuniones con Unidos Podemos es culpa del Gobierno?
No, son cuestiones distintas. En el ámbito parlamentario es culpa del Gobierno que las proposiciones de ley que se realizan desde la oposición se estén vetando. Igual que somos muy rigurosos apoyando las políticas de Estado vamos a ser implacables en denunciar las trabas que están poniendo al ejercicio de la oposición y a la ineficacia que tienen a la hora de dar respuesta a los problemas sociales.
¿Por qué no se ha vuelto a sentar la mesa de colaboración?
El PSOE tiene que tener muy claro su actuación como principal partido de la oposición y trabajar parlamentariamente en aquellas cuestiones en las que en su momento haya que llegar a acuerdos parlamentarios. Lo que me importa como portavoz es el liderazgo de la oposición en la presentación de propuestas sociales y en la denuncia de la inactividad del Gobierno.
Entonces, al principio cuando se anunció esa mesa de colaboración y la dirección del PSOE dijo que Podemos era su socio preferente, ¿había más complejos?
No se trata de un problema de complejos. No me gusta hablar de otras fuerzas pero es evidente que el liderazgo lo tiene el PSOE y nosotros vamos a trabajar por lo que creemos que es una prioridad en este momento: que en España haya un cambio de Gobierno progresista. Lo otro a veces son cuestiones internas de los grupos políticos. Mi concepción de la política es lo que importa de verdad a los ciudadanos. Para España quiero un presidente, como Pedro Sánchez, que salga a la calle, que escuche a los ciudadanos y vea sus problemas. No me gustan aquellos otros que buscan titulares y fotos.
¿Pablo Iglesias busca titulares?
No tengo por qué hablar de nadie. Todo el mundo me merece el máximo respeto.
Su principal diferencia siempre ha sido Catalunya. ¿Ahora hay más?
En Catalunya es evidente que hay unas diferencias clarísimas. Lamentablemente la vida política parece que se está centrando en este momento sobre el tema de Catalunya. Vamos a ver si de una vez el Parlament es capaz de dar salida a la situación y Puigdemont deja de pensar solo en sí mismo y vamos a ver si Catalunya puede superar esta página nefasta.