La Fiscalía de Madrid ha pedido el archivo provisional de la denuncia presentada por Ciudadanos tras los incidentes ocurridos durante la manifestación del Orgullo LGTB en Madrid el pasado 6 de julio, según ha adelantado la Cadena Ser. Tras acordar la apertura de diligencias de investigación, el Ministerio Público ve en los hechos un delito de coacciones porque los dirigentes fueron objeto de “insultos” y “amenazas” con el único objetivo de que abandonaran el lugar. Sin embargo, solicita el sobreseimiento provisional de la causa por falta de autor conocido.
La portavoz parlamentaria de la formación, Inés Arrimadas, junto a la secretaria de Mujer y LGTBI, Patricia Reyes y el secretario general del grupo parlamentario, Miguel Gutiérrez, denunciaron los hechos el pasado 10 de julio en la Fiscalía General del Estado. Aseguraron haber sufrido durante esa marcha “acciones violentas” y denunciaron los hechos como supuestos delitos de amenazas, injurias o contra los derechos fundamentales. La denuncia iba acompañada de vídeos con el momento de los incidentes en los que el partido aseguraba que se oía como algunos manifestantes llamaban “puta” a Arrimadas y “fascistas” al resto de dirigentes.
La Fiscalía entiende que los hechos denunciados consistieron en “insultos” y “amenazas” contra los integrantes de Ciudadanos con el único objetivo de que abandonaran la marcha, pero dado que las investigaciones policiales llevadas a cabo hasta la fecha no han podido determinar al autor o autores del delito pide al juez el sobreseimiento provisional de la causa.
Entre esas diligencias está la petición a la Brigada de Información de Policía de que identificara a las quince personas que realizaron una sentada “perfectamente” organizada al paso de la comitiva de Ciudadanos. El instructor de las diligencias de investigación penal pretendía, además, averiguar si el comportamiento de estas personas influyó en el desarrollo e la manifestación, si incitaron a la realización de actos violentos contra los miembros de Ciudadanos o si existió algún tipo de convocatoria para la realización del escrache. Sin embargo, a la Policía le resultó “imposible” identificar a dichas personas.
El informe policial que la Jefatura Superior de Policía de Madrid elaboró a raíz de esos incidentes contradecía la versión de Ciudadanos. Ese documento sostenía que no había “constancia” de que se produjeran “agresiones físicas” y afeaba a los dirigentes que no hubieran seguido “las instrucciones policiales”.
Según este documento, hubo “increpaciones, insultos, consignas políticas y algún lanzamiento aislado de algún objeto no peligroso y efectuado no entre los manifestantes sino entre el público asistente”. También se lanzó “agua con pistolas de juguete y alguna botella de plástico vacía, que no llega a impactar a nadie ni causar lesiones”.