El Gobierno aspira a acallar cuanto antes el ruido externo e interno que ha generado la reforma del Código Penal en el marco de la negociación política con ERC y con la reversibilidad de las condenas a los líderes del procés de fondo. Para ello, desde el Ejecutivo se intenta remarcar que los planes independentistas para celebrar un referéndum de autodeterminación tras conseguir derogar el delito de sedición y rebajar el de malversación no tienen cabida en la Constitución y, por tanto, no se llevarán a cabo.
“La agenda política de ERC es la suya y es contraria a la Constitución y, por tanto, no se va a celebrar en nuestro país ningún referéndum”, dijo la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes. Rodríguez insistió durante su comparecencia en que, a pesar de lo que digan los independentistas, “un referéndum de autodeterminación no se va a celebrar porque es contrario a la Constitución”. Y admitió los riesgos que conlleva la política territorial del Gobierno pese a que, en su opinión, está resultando efectiva.
“Este trabajo puede ser arriesgado, pero sin duda está siendo eficaz. El objetivo es la convivencia, no volver a la Catalunya de 2017, recuperar las relaciones con la Generalitat, dar una oportunidad al futuro con las inversiones llevadas a cabo”, argumentó la portavoz. Isabel Rodríguez esquivó cualquier respuesta directa a sus compañeros de filas en el PSOE que también están criticando la reforma del Código Penal como una cesión al independentismo. “Estamos trabajando en los márgenes que nos permiten las normas en nuestro país para dar cumplimiento a ese ámbito programático y a esos compromisos con nuestro país”, se limitó a contestar.
Tras ser repreguntada por las críticas de la oposición y de su propio partido, la ministra portavoz incidió en la misma idea que defiende el Ejecutivo tras las reformas llevadas a cabo. “Estamos adoptando decisiones pensando en la convivencia, en el futuro de Catalunya y el futuro de España. En 2017 Catalunya era la segunda preocupación de los españoles, esa es la situación que heredó este Gobierno. Ahora hemos conseguido que la preocupación esté por debajo del número 40. El compromiso de este gobierno será seguir trabajando por la convivencia y la concordia en Catalunya”, concluyó.
Page no cogió el teléfono
En el PSOE aseguran que desde la dirección del partido contactaron con todos los líderes territoriales para darles explicaciones sobre la amplia reforma del Código Penal y, más concretamente, del delito de malversación. Y que de todos ellos hubo uno que no respondió al teléfono: Emiliano García-Page. El presidente de Castilla la Mancha se ha mostrado especialmente crítico con esa reforma, llegando a afirmar que “no es tolerable pactar con delincuentes su propia condena”.
Fuentes socialistas consultadas por elDiario.es sostienen que esas declaraciones de Page “no son ninguna sorpresa” pero que, en cualquier caso, “los socialistas miramos siempre hacia adelante y resolvemos los problemas con valentía”. Esas mismas fuentes inciden en la postura que defiende el Gobierno de que los resultados de su política territorial están dando resultados. “Nadie puede negar que hoy España y Catalunya están mejor y que las gentes de Catalunya y España ya no tienen el problema que tenían en 2017”.