Los seis grandes pactos PP-PSOE para el primer trimestre de Gobierno
En los escasos tres meses que Mariano Rajoy lleva de su segundo mandato, el entendimiento entre el PP y el PSOE se ha traducido en media docena de grandes acuerdos. Los pactos han permitido al Gobierno presumir de capacidad de diálogo y a los socialistas erigirse como “oposición útil”. Los reproches de “pasteleo” por parte de Unidos Podemos indignan en Ferraz, aunque en Génova reconocen que sin la buena sintonía entre Javier Fernández y el jefe del Ejecutivo el primer trimestre de gobierno se les habría hecho mucho más cuesta arriba con sólo 137 escaños en el Parlamento.
El último ejemplo de este entendimiento que beneficia a ambos es la convalidación del Decreto Ley que regula la devolución de las cláusulas suelo. Tras la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que las declaró ilegales el pasado 21 de diciembre, el Gobierno retrasó una semana su aprobación en el Consejo de Ministros para llegar a un pacto con los socialistas.
A la espera de que quede aprobado este viernes, el PSOE ha presumido de mejorarlo para que las medidas sean de cumplimiento obligado y los bancos realicen una campaña masiva de comunicación. A cambio de esas incorporaciones, los diputados socialistas se abstendrán cuando el Decreto llegue al Congreso para ser convalidado y salga adelante con los votos del PP y Ciudadanos.
La segunda Conferencia de Presidentes organizada por Rajoy dejó el mismo sabor de boca. A pesar de la poca concreción, el compromiso de alcanzar una nueva financiación este mismo año dejó satisfechos en general a los presidentes socialistas. La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, elogió el trabajo preparatorio que había coordinado el extremeño Guillermo Fernández Vara y, en general, todos los mandatarios salieron satisfechos después de la jornada en el Senado. Conservadores y socialistas evaluarán además anualmente los acuerdos para asegurarse de su cumplimiento.
Gracias a la traumática abstención de la mayor parte del grupo socialista, Rajoy logró convertirse en presidente al segundo intento, el pasado 29 de octubre. El Gobierno ya era consciente de no llegar a tiempo para sacar adelante y en plazo unos nuevos Presupuestos Generales, pero el apoyo al techo de gasto supuso un primer paso importante. A cambio, los socialistas pudieron presumir de haber flexibilizado el objetivo de déficit de las autonomías y haber arrancado una subida del 8% en el Salario Mínimo Interprofesional.
La reforma del impuesto de sociedades, las medidas contra el fraude fiscal y la subida de los impuestos especiales, así como el bono social e impedir los cortes de suministros a los ciudadanos en situación de pobreza han demostrado los resultados de ese entendimiento que Unidos Podemos resume como “la triple alianza” cuando cuenta con la participación de Ciudadanos.
“Hay que obligar al PP a cambiar sus políticas, con su apoyo o contra él, y al mismo tiempo rehacer nuestro proyecto”, clamaba este jueves Alfredo Pérez Rubalcaba en su defensa de que es el PSOE quien evita que el Gobierno haga lo que quiera y el responsable de tumbar iniciativas como la LOMCE en cuanto a las reválidas. En palabras del exsecretario general, el PSOE “le está quitando las muelas sin anestesia” al Gobierno de Rajoy.