La Guardia Civil asegura que los jóvenes de Alsasua siguieron un “manual” de la “estrategia de ETA” contra las Fuerzas Armadas incautado en 2000

“Lo que hay que conseguir es que no entren en los bares”. Esta frase formaba parte de un “manual práctico” incautado en 2000 en un gaztetxe (casa de la juventud) de Olazti (Navarra), elaborado para explicar “cómo llevar a cabo” acciones “activas de desobediencia civil” y de “hostigamiento” hacia las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y, en concreto, hacia la Guardia Civil, en Euskadi y Navarra. Y según han explicado este martes los guardias civiles que elaboraron los informes de inteligencia sobre la supuesta agresión a dos agentes del cuerpo y a sus parejas en octubre de 2016 en Alsasua, los jóvenes acusados de ese ataque siguieron “punto por punto” el citado manual vinculado al movimiento Alde Hemendik que sitúan en la “estrategia de ETA”.

Así lo han declarado los agentes durante la séptima sesión del juicio contra los jóvenes de Alsasua que se sigue en la Audiencia Nacional. Han considerado que la supuesta agresión es la conclusión de “una campaña de hostigamiento anterior” contra la Guardia Civil y supone un hecho que “ha generado violencia” siguiendo las “directrices de ETA”. Los guardias civiles, que han declarado en calidad de peritos, han apuntado que en el citado “manual práctico” de Alde Hemendik se hablaba de tres fases que se debían implantar y que constituían “instrucciones para el futuro” contra las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Una primera fase sería la de la “ambientación”, a la que seguiría la fase de la “socialización del rechazo” a los cuerpos policiales y que concluía con la fase de “aislamiento y expulsión” de los mismos.

Todo ello, ha apuntado una de las agentes, “coincide” con el objeto del juicio: la supuesta agresión a los guardias civiles y sus parejas en el bar Koxka de Alsasua la madrugada del 15 de octubre de 2016. Acción que han vinculado, además, con el movimiento Ospa que, consideran, “indudablemente” sigue “la estrategia de ETA”.

En su declaración, los guardias civiles que elaboraron el informe sobre el posible delito de terrorismo que se atribuye a los acusados y que ha hecho que la Fiscalía pida para ellos un total de 375 años de cárcel, han explicado que el movimiento Alde Hemendik –Que se vayan o Fuera de aquí, en euskera– “fue fagocitado por ETA” desde su creación. Y que incluso formó parte de la alternativa Kas, que establecían como “condición sine qua non” para el fin de la violencia “la desmilitarización” de Euskal Herria. Han indicado, además, que la campaña Alde Hemendik ha sido mencionada por ETA en sus publicaciones, llamadas Zutabe o Zuzen, y que también la asumieron “como propia” al efectuar atentados contra los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y al mencionarla directamente al reivindicar esos ataques.

A partir de 2011, han proseguido, una vez que ETA anunció el cese definitivo de la violencia, se produjeron “autodisoluciones” de organizaciones que han asegurado que estaban relacionadas con la banda como Segi, Ekin o Askatasuna. Fue, según los agentes, el “blanqueamiento” de todas esas organizaciones, porque a pesar de ese final de la violencia de ETA “ninguno de los objetivos estratégicos cambió”. Así, a partir de 2011 se llamó a la creación de “movimientos sociales y populares” para “hostigar” a la Guardia Civil y otros cuerpos policiales en cada uno de los pueblos vascos y navarros contrarios a su presencia. Y en ese contexto sitúan la creación del movimiento Ospa y de los Ospa Eguna que se celebraron en Alsasua desde 2011 hasta 2016.

Además, han señalado que uno de los acusados por la supuesta agresión en el bar Koxka, Jokin Unamuno, figuró como convocante de una de las movilizaciones que llevó a cabo ese movimiento.

Las declaraciones de estos guardias civiles se producen después de que ayer, estos mismos agentes relacionaran a los acusados con la “disidencia” de la izquierda abertzale y de ETA contraria al cese de la violencia. Realizaron esta relación dado que dos de los encausados –Jokin Unamuno y Adur Ramírez de Alda– participaron en una manifestación a favor de los presos de la organización terrorista en Etxarri Aranatz que estuvo convocada por el “sector más radical” de esa izquierda abertzale.