La campaña de intoxicación contra PSOE y Unidas Podemos desata una batalla política: todos acusan al PP
A 24 horas de que comience oficialmente la campaña electoral, el PP está en la diana de los ataques de PSOE, Unidas Podemos y Más País. ¿El motivo? La campaña de intoxicación contra Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, simulando que Iñigo Errejón está detrás, que ha impulsado un empleado de una consultora que trabaja para el PP. La maniobra ha desatado una batalla de las tres formaciones de izquierdas contra los de Pablo Casado mientras Génova niega tener relación con la jugada.
Miles de carteles con las caras de Sánchez e Iglesias y frases como “No contéis conmigo” o “Yo no voto” se han colgado en ciudades como Córdoba, Murcia, Granada o Madrid, y esos eslóganes han aparecido vinculados a una página falsa de Facebook que simula apoyar a Más País. Tal y como ha desvelado eldiario.es, detrás de esa campaña de intoxicación y desmovilización de la izquierda está Josep Lanuza, que trabaja para Aleix Sanmartín, uno de los actuales consultores políticos del PP. Tanto el partido como su asesor se han desvinculado de dicha campaña y la atribuyen a una iniciativa individual de Lanuza, que se habría gastado entre 2.500 y 4.500 euros en la campaña de anuncios en Facebook, sin contar el coste de la pegada de miles de carteles en barrios de izquierdas de varias ciudades españolas con el mismo mensaje, el mismo diseño y a partir del mismo día.
Más País ha recurrido ante la Junta Electoral dicha campaña al considerar que “genera un descrédito para estas formaciones e indirectamente para todas las fuerzas políticas de la izquierda que concurren a las elecciones del 10-N, favoreciendo de manera evidente a las fuerzas políticas del espectro de la derecha o incitando directamente a la desmovilización del voto”. El partido de Errejón pide al organismo encargado de velar por la neutralidad de los procesos electorales “el cese inmediato” de la misma, así como que “incoe el expediente sancionador correspondiente” e inste las medidas penales que considere oportunas. La formación no descarta acudir a los tribunales, tal y como explica Rita Maestre en una entrevista con eldiario.es: “Entendemos que lo que se ha producido es constitutivo de delito porque se trata de una suplantación de identidad”.
El PSOE presentará su denuncia este jueves. En el recurso al que ha tenido acceso eldiario.es, los socialistas subrayan que las campañas son “contrarias al principio de transparencia” y que inducen “confusión entre el electorado”. El PSOE también instan a la Junta Electoral a castigar esa conducta pese al “anonimato” o a tratarse de “personas físicas”. Sostienen que no puede usarse como “escudo” porque “suponen una clara injerencia en los procesos electorales”. El recurso apunta directamente al PP al considerar que “está acreditada una relación indirecta –comercial o de afinidad–”, aunque actúen como “hombres de paja”.
El malestar en el PSOE es completo y ha llegado a la cúspide. Sánchez ha hecho alusión al caso en un mitin celebrado a última hora de este miércoles en Barcelona: “Resulta que el PP anda haciendo lo de Trump con estas campaña de noticias falsas diciendo que son votantes de izquierdas que andan disgustados con el PSOE. Que les quede bien claro (...) que cuenten con nosotros porque vamos a votar el 10 de noviembre, vamos a votar progresista y vamos a votar al PSOE”. “Primero caja B y ahora campaña en B, no tienen remedio”, ha reprochado.
Los socialistas denuncian, además, que llueve sobre mojado y acusan a Sanmartín de estar detrás de la campaña negativa contra Susana Díaz en los comicios del pasado 2 de diciembre que se impulsó bajo el nombre “Socialistas por el Cambio en Andalucía”. El consultor que trabaja ahora para Pablo Casado fue el responsable de la campaña del PP andaluz para las autonómicas e incluso recibió un premio por ella.
Unidas Podemos también ha salido al ataque contra el PP en varios mensajes a través de redes sociales, aunque en el momento de redactar esta información estaba “valorando” si daban algún paso más, como acudir a la Junta Electoral. “Financiaron ilegalmente sus campañas, usaron a los mafiosos de las cloacas policiales y mediáticas para mentir sobre Podemos y ahora lanzan una campaña posiblemente ilegal llamando a la abstención. El PP es experto en juego sucio para amañar la democracia”, ha denunciado el responsable de Acción de Gobierno, Acción Institucional y Programa de Podemos, Pablo Echenique.
Por su parte, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha cargado este jueves contra el PP por “utilizar prácticas inaceptables e ilegales”. “El PP emplea una dinámica de cloacas pata perjudicar a sus adversarios”, ha afirmado Iglesias en una entrevista en la radio RAC-1, en la que no ha dudado en definir el uso de propaganda masiva contra PSOE y Podemos como “cloaca en campaña”. “La cloaca es ilegal y este tipo de medidas son ilegales”, ha añadido. El líder de Podemos también ha instado a la Junta Electoral a perseguir este tipo de actividades.
El PP: “No sabemos de dónde sale”
Desde la dirección del PP han negado en todo momento cualquier vinculación con la campaña de intoxicación. “No tenemos nada que ver. No sabemos de dónde sale”, explicaban fuentes de Génova, en relación a la iniciativa a favor de la abstención financiada por Josep Lanuza, uno de los trabajadores de Aleix Sanmartín, a su vez asesor electoral de Casado. El equipo del líder del PP reconoce que Sanmartín “colabora” con los populares, aunque niega que sea su “principal gurú” y argumenta que con el partido “colabora mucha gente”.
Las fuentes del PP consultadas se han negado a concretar si la empresa de este consultor, llamada Sanmartin Group, es una de las que está elaborando la campaña para el 10N.
Cuando este jueves le han preguntado por el tema, Pablo Casado ha dicho que es la “primera noticia” que tiene y que su partido “juega limpio”: “No hay mejor defensa que un buen ataque, y como [la Junta Electoral Central] ha condenado a Pedro Sánchez y a la izquierda por hacer mítines en la Moncloa y por hacer publicidad pagada en las redes sociales, intentan embarrar el terreno de juego”. “Yo quiero que salga todo el mundo a votar, también los votantes de izquierdas”, ha añadido.