La jueza sienta en el banquillo a Jiménez Losantos y le impone una fianza de 100.000 euros por calumniar a Ábalos

La titular del Juzgado de instrucción nº8 de Madrid ha ordenado la apertura de juicio oral contra el periodista Federico Jiménez Losantos por insinuar en su programa de EsRadio que el exministro José Luis Ábalos ayudó a la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, a introducir maletas “con cocaína, con oro o con divisas” en España. En el auto al que ha tenido acceso este diario, la jueza Rosario Espinosa Merlo impone al locutor una fianza de 100.000 euros.

La magistrada atiende de este modo a un auto de la Audiencia Provincial de Madrid del pasado septiembre en el que ordenaba procesar por injurias y calumnias a Jiménez Losantos por haber hecho esa afirmación sin contar con ningún tipo de prueba o indicio. Los jueces estimaron entonces un recurso del exministro socialista contra el archivo de la causa y consideraron que el periodista vertió esas afirmaciones sobre las maletas de la dirigente chavista sin tener conocimiento real de lo que había dentro y basándose en informaciones periodísticas de su propio medio o, incluso, en especulaciones de Santiago Abascal.

El juzgado, en contra del criterio de la Fiscalía, ha dictaminado este miércoles la apertura de juicio contra el presidente de Libertad Digital y contra el propio grupo, que comprende la página web del mismo nombre y la cadena de radio esRadio. El Ministerio Público tiene ahora tres días para formular su escrito de acusación sin que se puedan interponer recursos a la decisión excepto en lo que tiene que ver con la “situación personal” del periodista.

Jiménez Losantos se sentará así en el banquillo por sus palabras en falso sobre el ministro y la vicepresidenta venezolana. El presentador se refirió al caso de Delcy Rodríguez y el papel del entonces ministro de Transportes en el matinal 'Es la mañana' del 23 de marzo de 2021, cuando sostuvo entre otras cosas que existían “nueve versiones distintas y todas falsas” del caso, aludiendo a 40 maletas “con cocaína, con oro o con divisas, que entraste tú, que metiste tú, en España, de la mano de tu amiga la Delcy Rodríguez”.

Las palabras del periodista venían a colación del denominado 'caso Delcy' sobre el aterrizaje de la dirigente venezolana en el aeropuerto de Madrid, en enero de 2020, pese a que tenía prohibido el acceso a la Unión Europea por las sanciones contra el país caribeño. Tanto el Tribunal Supremo como un juzgado de la Plaza de Castilla de Madrid investigaron el caso y archivaron las múltiples denuncias y querellas sobre el paso de la mandataria venezolana por España.

Un año después, Losantos habló de nuevo del tema en su programa en los términos citados. Ábalos presentó una denuncia en el juzgado, que primero desestimó la demanda y tras la decisión de la Audiencia Provincial se ha visto obligado a procesarle. A la hora de corregir el archivo de la causa, los jueces entendieron que Jiménez Losantos había hecho esas declaraciones sin tener conocimiento real de lo que había dentro y basándose en informaciones periodísticas de su propio medio o, incluso, en especulaciones de Santiago Abascal.

“Sin realizar una específica tarea de comprobación, persistir en la afirmación de que el Sr. Ábalos había introducido en España varias maletas que contenían cocaína, oro o divisas, no satisface el canon de veracidad, pese a lo cual la difundió”, reprocharon en el auto los jueces de la Audiencia. Pudo incurrir en injurias o calumnias porque, según esta resolución, con sus palabras pudo atribuir un delito al exministro. El juzgado que instruyó el caso había entendido que el periodista había hablado amparado por la libertad de expresión.

“Sin saber lo que las maletas contenían, si que afirmó que o contenían cocaína o contenían oro o contenían divisas, pero alguna de estas cosas. Se pudo atribuir así al querellante de hechos susceptibles de ser considerados un delito contra la salud pública, ya como un delito de blanqueo de capitales, o en todo caso una conducta que en su condición de político en activo pudo ser altamente lesiva de su dignidad”, proseguía el auto.