Moscú, 30 ago (EFE).- El Kremlin no teme que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, sea detenido en Mongolia durante su próxima visita oficial debido a la orden de arresto de la Corte Penal Internacional (CPI) en su contra y que el país asiático debería ejecutar.
“No, no estamos preocupados (...) Tenemos un magnífico diálogo con nuestros amigos de Mongolia”, zanjó el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, al ser preguntado si existían temores respecto a la posible detención del mandatario ruso en el vecino país.
Peskov añadió que “todos los aspectos de la visita ha sido preparados minuciosamente”.
Putin realizará el próximo 3 de septiembre una visita oficial a Mongolia, donde se reunirá en Ulán Bator con su homólogo mongol, Ukhnaa Khurelsukh, con quien “intercambiará opiniones sobre las relaciones bilaterales y la cooperación”.
Además, participará en un evento conmemorativo por el 85º aniversario de la batalla del río Khalkh, en la que tropas soviéticas y mongolas se enfrentaron a fuerzas japonesas.
Será la primera visita de Putin a un Estado miembro de la CPI desde que este organismo emitiese el pasado año una orden de detención contra el mandatario ruso por presuntos crímenes de guerra en Ucrania, una decisión criticada por Moscú.