La decisión de la Radio Televisión pública de Portugal (RTP) de no participar en la próxima edición de Eurovisión es ahora contestada por un movimiento ciudadano que pretende hacer recapacitar a la cadena.
Los defensores del festival lanzaron una campaña de recogida de firmas a través de Internet con el propósito de llevar este asunto al Parlamento y que se debata sobre los beneficios para el país de tomar parte en esta competición, petición que hasta hoy apenas ha logrado 184 apoyos.
La dirección de la emisora justificó su postura tras analizar la participación de Portugal en Eurovisión en el pasado, y alegó que es momento de “sustituir y crear nuevos contenidos”, aunque expresó su intención de regresar en 2017.
De esta forma, 2016 será el quinto año en que Portugal no va a Eurovisión, tal y como ocurrió en las ediciones de 1970, 2000, 2002 y 2013.
En la última ocasión, los motivos que llevaron a RTP a optar por no acudir a la cita musical fue la falta de presupuesto derivada de la severa crisis que atravesó el país.
Los aficionados lusos a Eurovisión consideran inaceptable la decisión por considerar que el festival permite divulgar la música original hecha en Portugal y recuerdan que supone un acontecimiento europeo seguido por millones de personas y en el que participan más de 40 países.