El Gobierno ha accedido a la petición del PSOE y separará de la reforma del Código Penal las medidas de lucha contra el terrorismo yihadista para alcanzar un pacto de Estado con el principal partido de la oposición, el primero de la era Pedro Sánchez.
El acuerdo se plasmará en una proposición de ley orgánica conjunta entre el PP y el PSOE que ambos partidos empezarán a negociar “de forma urgente e inmediata” en el Congreso de los Diputados, y al que invitarán a sumarse también al resto de los grupos parlamentarios.
La base de la que partirán las negociaciones serán las doce enmiendas sobre terrorismo que el PP ha presentado al Código Penal, sobre el que no hay consenso, y cuyo dictamen será sometido a votación el próximo jueves en la Comisión de Justicia del Congreso, que seguirá con la tramitación prevista para ser remitido al Senado el próximo día 21. La idea es que ambos debates –el del terrorismo y el del resto de la reforma– transcurran de forma separada pero “paralela”.
La decisión fue anunciada con solemnidad por los ministros de Justicia, Rafael Catalá, y de Interior, Jorge Fernández Díaz, tras la reunión que han mantenido en la tarde de este martes en la sede de Interior con una delegación del PSOE encabezada por el portavoz parlamentario, Antonio Hernando.
“La cuestión sobre el yihadismo y la manera de afrontarlo desde el Estado requiere de un auténtico acuerdo de Estado entre el Gobierno y el PSOE, cuando menos, con la voluntad de que ese acuerdo se amplíe al mayor número de fuerzas políticas”, ha afirmado Fernández Díaz.
El titular de Justicia, Rafael Catalá, ha destacado que las medidas que se negociarán con el PSOE van dirigidas a “fortalecer el Estado de derecho y las capacidades de investigación del Poder Judicial, los fiscales y las Fuerzas de Seguridad”.
Hernando, que compareció después junto al resto de la delegación de su partido, ratificó también el pacto con el Gobierno y se mostró esperanzado de que se pueda alcanzar un “amplio consenso”. “El terrorismo es una cuestión de Estado que requiere la máxima unidad”, ha dicho nada más empezar su breve comparecencia ante los periodistas.
Al igual que dijo por la mañana, el portavoz del PSOE insistió en la necesidad de “trasladar a España ese espíritu de París, el de la unidad de todos los demócratas”.
El encuentro entre el Gobierno y el PSOE, del que no hay testimonio gráfico, apenas ha durado una hora. Según han justificado sus protagonistas, el motivo de esa brevedad ha sido que no se ha entrado a hablar de ningún punto del articulado, algo que comenzarán a hacer “mañana mismo”.
“Si hay voluntad, se puede llegar a un acuerdo”, ha asegurado Hernando. “Para nosotros, el hecho de negociarse ya hará que sea un texto más garantista y asumible. Estamos convencidos de que vamos a poder y que el acuerdo va a ser amplio”, ha vaticinado.
La reunión ha logrado romper la tensión que había instalada entre el Gobierno y el PSOE. Hasta el punto de que Hernando no se ha mostrado nada beligerante al finalizar el encuentro y, al ser preguntado por “lo que no le gusta” de las actuales enmiendas del PP, se ha limitado a responder que “hay redacciones francamente mejorables desde el punto de vista jurídico y algunas otras que crean inseguridad jurídica”. “Si hay voluntad, se puede llegar a un acuerdo para tener seguridad sin perder un ápice de libertad”, ha concluido.