Rodeado de banderas españolas y europeas, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado las 110 principales medidas de su programa para las elecciones del 28 de abril. Sin incorporar grandes novedades con respecto a las promesas de otras competiciones electorales y no hacer ninguna alusión concreta al conflicto territorial, el líder socialista ha reclamado el apoyo mayoritario en las urnas para no depender de nadie.
En un momento en el que el PSOE huye del debate de los pactos postelectorales para que no le pase factura por ningún flanco y que el resto de formaciones sí muestra nerviosismo -como Albert Rivera que ha reclamado a Pablo Casado una coalición antes de pasar por las urnas-, Sánchez ha insistido en su llamamiento a la movilización de los socialistas para lograr una mayoría holgada que le permita depender básicamente de sí mismo.
“España necesita un Gobierno fuerte que hable con todas las fuerzas pero que dependa de sus propias fuerzas”, ha expresado en el acto celebrado en el Teatro Gran Maestre de Madrid ante unas doscientas personas, fundamentalmente altos cargos del Gobierno, y con todos sus ministros, excepto Josep Borrell, que está en un viaje oficial con los reyes en Argentina.
“Mayoría, fortaleza proyecto dialogo y estabilidad. Son los cinco pilares sobre las que vamos a desplegar nuestra acción de Gobierno a partir del 28 de abril”, ha dicho Sánchez, para quien el programa de los socialistas debe plantear una “nueva mirada” al país para que deje de ser la “tierra de nuestro padres y abuelos” para convertirlo en lo que queremos para “nuestros nietos”.
Sánchez ha dejado claro que su programa será la línea continuista de sus nueve meses en Moncloa y ha reclamado la confianza de los electores para “consolidar el cambio de rumbo”.
Familias numerosas las monomarentales con dos hijos
La mayoría de las medidas del programa de los socialistas ya habían sido promesas en otros comicios o se habían incorporado al argumentario desde las últimas generales en función de los acontecimientos, como el cambio de la tipificación penal para que la violencia sexual no sea considerada en ningún caso un abuso: “La violencia contra la mujer no es un simple abuso. Si una mujer no da su consentimiento, todo lo demás es no”, ha dicho el presidente en uno de los momentos en los que ha logrado el aplauso de los asistentes.
La principal novedad es que los socialistas se comprometen a considerar familias numerosas -que tienen algunos beneficios sociales- a las monoparentales o monomarentales con dos hijos o más. Así, Sánchez ha asegurado que impulsará una nueva ley de familias para contemplar todos los tipos.
Sánchez quiere de nuevo poner en el centro del debate la lucha contra la pobreza infantil, para lo que pretende impulsar un Plan Nacional. Repite su medida estrella de 2015: la incorporación de un ingreso mínimo vital, una suerte de renta mínima con la que pretende llegar a 700.000 familias en riesgo de exclusión social. También ha insistido en la necesidad de aprobar una ley contra la violencia infantil.
En materia educativa, Sánchez vuelve a comprometerse con las escuelas infantiles y pone cifras en su avance “hacia la gratuidad de las escuelas infantiles para niños y niñas de cero a tres años”, comenzando por las familias más vulnerables.. Su idea es comenzar con las familias más vulnerables con el objetivo de que “para 2025 un 50% de los menores de tres años estén atendidos en centros” gratuitos.
Salud bucodental pública y plan contra el suicidio
Sobre la educación universitaria, Sánchez ya había hecho suya la gran promesa de Susana Díaz en la batalla de las primarias relacionada con la gratuidad de las matrículas. “Trabajaremos para establecer de forma gradual un sistema que garantice la gratuidad de las primeras matrículas en los estudios de grado de las universidades públicas”, reza el programa. Ximo Puig, que se presenta a las elecciones valencianas también el 28 de abril ha hecho una propuesta similar al plantear la gratuidad para los alumnos que aprueben.
En sanidad también incorpora una novedad relacionada con la salud bucodental, que el PSOE pretende su “progresiva incorporación” a la cartera de servicios. Además de realizar una nueva estrategia de renovación del sistema público de salud, el programa aspira a desarrollar “una nueva estrategia de salud mental, reforzando los servicios de salud mental infantil-juvenil, e incluyendo un plan para la prevención del suicidio”.
Ley de libertad de conciencia y eutanasia
Uno de los pilares fundamentales del programa de los socialistas es la recuperación de derechos y las nuevas libertades. Así, uno de los compromisos es impulsar una ley de libertad de conciencia. Sánchez aspira a lograr una de sus promesas que han sido inviables en esta legislatura: la elaboración de una nueva ley de seguridad ciudadana que sustituya a la 'ley mordaza'. También reitera que el próximo ciclo político debe alumbrar una ley de eutanasia para que las personas vivan pero también mueran con “dignidad”.
En materia económica, Sánchez promete que las pensiones volverán a revalorizarse conforme al IPC, que es una de las reivindicaciones de las protestas de los jubilados y que ha sido imposible modificar en esta legislatura. “Estableceremos una senda de cinco años para superar y eliminar el déficit del sistema de Seguridad Social a través de la adopción de un conjunto de medidas que garanticen la sostenibilidad financiera de largo plazo del sistema”, dice sin concretar cómo se llevará a cabo.
Ni el resumen del programa ni Sánchez en su presentación hacen mención expresa al conflicto territorial en Catalunya. “Nos comprometemos a seguir construyendo la España de Autonomías. Fortaleceremos el modelo autonómico como instrumento fundamental de reconocimiento de la singularidad y las opciones políticas propias de cada Comunidad Autónoma, del desarrollo equilibrado de todas ellas, de la mejora de los servicios públicos y la garantía de la igualdad de oportunidades de todos los ciudadanos en España”, dice el texto, que continúa: “Desarrollaremos los procedimientos de participación de las comunidades en las decisiones del Estado, y especialmente en la legislación”.
Los socialistas también retoman la promesa de elaborar un nuevo sistema de financiación autonómica que Sánchez dio por perdida nada más llegar a Moncloa bajo el pretexto de que no le daba tiempo.