Pedro Sánchez promete el reconocimiento del derecho a la eutanasia y a una muerte digna si gobierna

El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado su intención de poner “encima de la mesa” en la próxima legislatura el reconocimiento del “derecho a la eutanasia y a una muerte digna” si gobierna. Para ello, ha instado a la movilización con el objetivo de que esta formación logre “una mayoría parlamentaria”.

“Si nos dan una mayoría, derogaremos la reforma laboral y haremos un nuevo estatuto de los trabajadores”, ha expuesto también Sánchez en un acto de partido en A Coruña, ante unas 1.500 personas, junto a otros dirigentes del partido en Galicia como el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero.

En él, ha reivindicado también al PSOE como el partido “que une a España” frente a una derecha --conformada por PP, Vox y Ciudadanos-- “excluyente”. “O queremos un país que avance o que retroceda”, ha resumido al aludir a lo que “se juega” España en estos comicios.

Para ello, ha instado a la movilización “y a no confiarse”. “A aprender de lo que ocurrió en Andalucía”, ha añadido Sánchez, quien ha vuelto a defender las medidas aprobadas por decreto ley por el Gobierno por “los obstáculos” de la Mesa del Congreso.

“Vamos a gobernar hasta el último minuto de esta legislatura”, ha apostillado el presidente del Gobierno, quien ha acusado también a la derecha de querer “transformar la democracia en dedocracia”. “Y se equivocan, España necesita acuerdos, es los quieren los españoles”, ha recalcado.

CORDONES SANITARIOS

Por otra parte, ha afirmado que en las elecciones de abril la elección es entre una España en la que “vivamos todos” o “en la que solo caben los tres”, ha dicho de nuevo en alusión a PP, Vox y Ciudadanos, partido al que ha reprochado que pretenda poner “cordones sanitarios” al PSOE.

“Al partido que derrotó a ETA, que acordó la ley igualdad de hombres y mujeres, al partido que puso en pie el sistema público de pensiones”, ha citado como ejemplos al reivindicar las políticas socialistas.

APELA A LA ESPAÑA “MODERADA”

“Ser patriotas no es gritar 'Viva España, es trabajar para que se viva mejor”, les ha replicado también. Sin descartar “hablar con todos los progresistas”, --de cara a posibles acuerdos de gobierno--, ha apelado a hablar, sobre todo, “con la España moderada, cabal y sensata”.

Así, ha insistido en que en estas elecciones se trata de decidir entre “un país que avance o que retroceda”. “Si queremos un país en el que quepamos todos o no”, ha dicho reprochando, en particular a Rivera, una concepción de la democracia en la que solo caben “los que piensen como él”.

“Cuando dicen que no somos constitucionalistas, lo que dicen es que califican de constitucionalista a aquellos que leen la Constitución como ellos consideran”, ha criticado Sánchez, quien ha arremetido también contra una “ultraderecha” que “trabaja en hacer listas negras en la Junta de Andalucía”.

“VIERNES SOCIALES”

En relación a las críticas de estas formaciones a las medidas aprobadas por decreto ley, ha dicho también que “lo que les molestan no son los viernes sociales”. “Les molestan las políticas sociales”, quien ha instado a la derecha a decir “si está o no de acuerdo” con medidas como la ampliación del permiso de paternidad.

Con todo, ha considerado que el PP está siendo “más coherente” en esta cuestión que Ciudadanos. “Porque nunca han creído en la igualdad entre hombres y mujeres”, ha añadido sobre los populares y frente a un Rivera que “anda cambiando de chaqueta”.

“A este hombre no sé lo qué le pasa”, ha ironizado el presidente del Gobierno, quien, ha terminado su intervención haciendo suyas las palabras de una canción de Víctor Manuel. “O cabemos todos o no cabe ni Dios”, ha señalado en un discurso en el que ha defendido el modelo de sociedad “incluyente” del PSOE frente a la “excluyente” de la derecha.

PROTESTAS ALCOA

Antes de la llegada del presidente del Gobierno al acto, en el exterior del polideportivo San Francisco Javier, --donde ha tenido lugar-- se han concentrado trabajadores de la planta de Alcoa, en A Coruña y de Poligal, de Narón, que, en ambos casos, reclaman medidas que evite el cierre de sus plantas, y representantes del colectivo de prisiones que reclaman mejoras salariales y laborales.