El Congreso de los Diputados ignora los temas de la pobreza y el desarrollo. Es una de las conclusiones del informe Avizor en el que se ha analizado la actividad parlamentaria durante el año 2012. La labor de los diputados es deficiente en cuanto a la “promoción de un sistema internacional más justo, sostenible y equilibrado”, según el análisis, que señala que tres de cuatro iniciativas parlamentarias ignoran las consecuencias para terceros países o incluso son perjudiciales. Esto se debe al “escaso interés y conocimiento” de sus señorías en esta materia: solo el 22% han hecho propuestas con una visión prodesarrollo, que en realidad podría ser transversal a muchas políticas.
Tampoco el funcionamiento del Congreso responde a los problemas de desarrollo. La forma de trabajo, a través de comisiones, es “rígida y parcelada” lo que, sumado a la “ausencia de órganos y mecanismos internos”, provoca que se tomen decisiones “incoherentes” y que surjan conflictos. El estudio también carga contra las mayorías absolutas que “limitan el debate y la actividad parlamentaria en el ámbito del desarrollo internacional” e incluso “merman la calidad del juego democrático”.
Además, la poca actividad parlamentaria relacionada con el desarrollo “no es pública” o su acceso por parte de la ciudadanía “es escaso”. En este sentido, el Centro de Investigación y Estudios sobre Comercio y Desarrollo, que firma el informe, apunta a la gravedad de que el reglamento de la Cámara Alta no vaya a someterse a la Ley de Transparencia.
Sin embargo, cabe destacar la actividad y compromiso de un número, aunque reducido, de diputados de distintos grupos parlamentarios hacia la problemática de la pobreza internacional. La organización celebra la actividad de estos diputados y ha decidido nombrar diputada del año por su actividad en este campo a la diputada del Grupo Parlamentario de Izquierda Plural, Laia Ortiz. No obstante, el informe señala que en muchas ocasiones la repercusión mediática y la presión de los partidos sobre los grupos parlamentarios acaba con la iniciativa individual.
El Proyecto recoge una mayor actividad prodesarrollo dentro del Grupo Parlamentario Izquierda Plural (47,4%). También destaca las iniciativas de CiU y PNV, frente a las que impulsan los dos grupos mayoritarios, PP y PSOE, que son los que tienen menos en cuenta el desarrollo y la pobreza.
Por todas estas evidencias, el Proyecto considera necesario “fortalecer el papel de la Comisión de Cooperación Internacional al Desarrollo del Congreso” así como la “creación de un inter-grupo parlamentario sobre Coherencia de Políticas para el Desarrollo”. Para poder contribuir a la lucha contra la pobreza y promover el desarrollo también resulta imprescindible que los grupos parlamentarios añadan a su programa electoral iniciativas relacionadas con esta cuestión y la promoción de las organizaciones sociales de la sociedad civil. Por último, el informe destaca la necesidad de un “sistema de listas desbloqueadas”, no solo para que los ciudadanos puedan elegir a los diputados sino también para poder incentivar a estos en la propuesta de iniciativas individuales.