Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han acudido esta mañana a la sede de la Presidencia de la Ciudad Autónoma de Melilla en el marco de la investigación del intento de fraude masivo por correo, informan a elDiario.es fuentes próximas a las pesquisas. Los agentes portaban varias órdenes para el requerimiento de información firmadas por la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Melilla, que mantiene el secreto de las actuaciones.
El presidente de la ciudad autónoma es Eduardo de Castro, expulsado de Ciudadanos, y que gobierna la ciudad con mayoría de consejeros de Coalición por Melilla y otros del PSOE. Los mandatos judiciales afectan a varios organismos vinculados a la Ciudad Autónoma, precisan las mismas fuentes. De Castro cederá el poder al que ya fuera presidente de Melilla, Juan José Imbroda, del PP, después de que éste obtuviera la mayoría absoluta en las elecciones del 28 de mayo.
En el marco de esta investigación se produjeron una decena de arrestos en los días previos a la cita electoral del 28 de mayo. Los arrestados, en libertad a la espera de ser llamados por el juzgado, están acusados de participar en una red que compraba a ciudadanos para que solicitaran el voto por correo y sus miembros se encargarían después de depositarlos en las oficinas de Correos.
Entre los detenidos en aquel momento figuraba un yerno de Mustafá Aberchán, el histórico líder de Coalición por Melilla que no podía presentarse a las elecciones por la inhabilitación que sufrió por otra compra de voto por correo. También fue detenido el consejero de Distritos, Juventud y Participación Ciudadana Mohamed Ahmed Al-lal, que fue destituido del cargo antes de los comicios.
Las urnas de Melilla finalmente registraron 3.612 votos depositados por correo de cara a las elecciones del domingo 28 de mayo. En total se había solicitado 11.727 que se habían solicitado en un primer momento y puestos bajo sospecha después de la operación policial contra un entramado de compra de este tipo de sufragios a distancia. La decisión de la Junta Electoral de Zona de exigir el DNI también para depositar el voto por correo, no solo para solicitar ejercerlo de ese modo, abortó el fraude masivo. Esa medida fue ampliada por la Junta Electoral Central a todo aquel que quisiera votar por correo en Melilla desde cualquier punto de España.