La dirección del PP, ante las “bajas expectativas” en Andalucía: “Quien se la juega es Juanma Moreno, no Casado”
El presidente del PP, Pablo Casado, ha decidido “volcarse” en la campaña de las andaluzas, con más de 45 actos programados y un recorrido de 9.363 kilómetros para 11 de los 15 días previos a las elecciones del próximo 2 de diciembre. En los dos primeros ha participado en casi 12 encuentros o mítines y su equipo no descarta que en las próximas jornadas añada nuevos compromisos en su apretada agenda. A pesar del despliegue del líder nacional de los populares, la dirección nacional del PP advierte de que si al partido le va mal en las urnas en Andalucía el único responsable será el candidato regional, Juanma Moreno, por lo que derrota en ningún caso afectaría al liderazgo de Casado.
Fuentes de la cúpula de los populares reconocen durante la campaña que acuden a las urnas andaluzas con bajas expectativas. “Tan bajas” que, según explican, podrían considerar un éxito un resultado que no les permitiera gobernar pero que sí les situara en segunda posición, siempre que los andaluces decidieran colocarles por detrás del PSOE de Susana Díaz y por encima de Ciudadanos. Génova no se cree, sin embargo, las encuestas que apuntan a que la formación de Albert Rivera podría protagonizar el tan temido sorpasso adelantando a los populares en las elecciones del 2 de diciembre.
Un mal resultado no se podrá relacionar, en ningún caso, con la hiperactividad de Casado ni con su permanente presencia en la campaña andaluza –el viernes tuvo seis actos y el sábado otros seis–. “Que Casado se vuelque no le vincula al resultado. Quien se la juega es Juanma, no Casado”, insisten fuentes del más alto nivel de la dirección nacional del PP.
Génova remarca que la frenética agenda de su máximo jefe no se debe a una “sobreactuación” sino que el líder popular considera que “ya que va” a Andalucía, aprovecha para realizar todos los actos que las horas del día le permiten. El equipo de Casado insiste en que a Moreno “le viene bien” que el presidente nacional tenga su propia caravana de campaña. Los dos líderes coinciden este domingo en un mitin en Algeciras.
Lo que no descarta la dirección nacional del PP es, sin embargo, que el resultado de los comicios andaluces dibuje un Parlamento autonómico ingobernable en el que ninguna alianza permita iniciar la legislatura y que, por tanto, la presidenta en funciones, Susana Díaz, tenga que repetir las elecciones. De ser así, las fuentes consultadas consideran que la dirigente socialista haría coincidir los comicios con las municipales, un escenario que consideran que beneficiaría tanto a los populares como los socialistas.
Si hay repetición de elecciones, ¿volvería a ser Moreno el candidato? Las fuentes de Génova dan a entender que la del 2D es la última oportunidad del actual líder del partido en Andalucía, pero evitan aventurar lo que sucederá y aseguran que habrá que “analizar los resultados” que arrojen las urnas.
Las generales, el 15 de diciembre de 2019
Respecto a la hiperactividad de Casado, la dirección del PP reconoce que se debe a que desde su victoria en las primarias el líder de los populares ha puesto “los warning” –la situación de alerta– ante un posible adelanto de las elecciones generales por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Ahora, sin embargo, no cree que se vaya a producir ese adelanto a pesar de que se haya pasado “del Gobierno Frankestein al Gobierno zombi, porque está muerto”.
Génova se atreve incluso a dar una fecha concreta de los comicios: el 15 de diciembre de 2019. La dirección del PP argumenta que será entonces porque es cuando se cumplen los cuatro años de las elecciones convocadas por Rajoy en diciembre de 2015.
“Hasta entonces, Sánchez aguantará”, aventura el equipo de Casado, que apunta a que hay ministros como el de Fomento, el también secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, así como varios barones socialistas que quieren que haya adelanto de las generales, frente a la vicepresidenta, Carmen Calvo, que se resiste. Esa resistencia y el afán por mantenerse en la Moncloa han hecho, según el PP, que los socialistas estén “empeñados” en vincular a Casado con la extrema derecha. “Es la misma estrategia que siguieron con Aznar y con Rajoy”, argumenta Génova.
La dirección de los populares insiste en que no le preocupa la irrupción de Vox, pero reconoce la división de la derecha que Casado pretende unir y encabezar como líder del PP: “Nunca ha habido tanto voto centro derecha, aunque está fragmentado”, zanjan las fuentes consultadas.