Pocos minutos después de que Mariano Rajoy lo hubiera ascendido a coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo se presentó en la sala de prensa de la Caja Mágica para intentar contestar a todas las preguntas de los periodistas. Contó que estaba “muy contento”, que Rajoy le comunicó sus intenciones este mismo viernes antes de discutirse la ponencia política y de estatutos, que María Dolores de Cospedal “lo sabía, por supuesto” y que el resto de vicesecretarios se enteró en directo.
Proclamado con el 95,65% de los votos de los compromisarios, Rajoy ha agradecido los apoyos a su cuarto mandato como máxima autoridad del partido. Aunque muy alto, el respaldo ha caído dos puntos si se compara con el recibido en el Congreso de Sevilla, celebrado en 2012. En esta ocasión, de los 3.128 compromisarios han votado 2.645. De ellos, 2.530 han alzado la cartulina del 'sí' para avalar la lista del Comité Ejecutivo; otros 115 han sido votos en blanco y sólo 14 nulos.
La falta de entusiasmo de Cospedal
La cara de felicidad de Martínez-Maillo contrastó con la que en algunos momentos ofrecía su jefa, que ha estado en el centro de la polémica por su acumulación de cargos. Martínez-Maillo defendió que probablemente el “cansancio” era el motivo porque él la había visto “bien”. Aún no está claro cómo delimitarán ambos sus funciones: “Tenemos que organizarnos, también es cuestión de tiempo porque las ocupaciones de un ministro de Defensa llevan mucho tiempo. Y yo me voy a dedicar full time”.
Fuentes del partido, en cambio, atribuyen el gesto serio de la secretaria general a que ha acusado la discusión interna por su pluriempleo. Y a que su relación con Martínez-Maillo se ha ido deteriorando a medida que acaparaba la atención pública y de Rajoy. En el equipo de Cospedal, además, responsabilizan al nuevo coordinador de no haber parado a tiempo la enmienda que apuntaba directamente contra ella y cuyo recuento ha dado lugar a acusaciones de “pucherazo”, además de provocar dos dimisiones.
Con este cargo de coordinador, el PP vuelve al modelo organizativo de la época de Ángel Acebes, cuando era secretario general Francisco Álvarez Cascos. Maillo ha aclarado que lo de Rajoy no fue una propuesta, sino una comunicación: “Aquí nadie te propone nada. Son lentejas”.
A pesar de que, por organigrama, estará por encima de los otros cuatro vicesecretarios, Maillo ha asegurado a la prensa que se siente “uno más” y que así funcionan en el día a día. Y se ha servido de la frase de Rajoy, “no se cambia lo que funciona”, para afirmar que está satisfecho del equipo que forman.
Los salientes
Entre los salientes, José Manuel García-Margallo, Iñaki Oyarzábal –que sale aunque entra otro miembro del PP vasco, Borja Sémper– Ana Botella, Juan José Lucas, Alberto Ruiz-Gallardón o José María Lassalle. La frase con la que intentó consolar a los que se caen de la lista fue: “He procurado que nadie deje de sentirse representado. Gracias a los que no he podido incluir. Seguimos contando con todos”.
En el caso de Oyarzábal, su puesto lo hereda Mari Mar Blanco (hermana del concejal asesinado Miguel Ángel Blanco). El alavés ya preside su partido en esa provincia y es además senador. Hasta ahora era secretario de Libertades Públicas y Justicia.
Su discurso anterior a que empezara a recitar los nombres fue un cúmulo de recortes de intervenciones anteriores. El más elaborado se producirá mañana, cuando clausure el 18º congreso después de presidir la primera reunión del nuevo Comité Ejecutivo Nacional.
Aplausos para la vicepresidenta
Quizá el nombre más aplaudido ha sido el de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, que ya estaba en el Comité, pero que ahora cuenta con un 'sorayo', como es el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón.
Otro de los dirigentes del PP que ha conseguido sumar nuevos nombres en el Comité Ejecutivo es la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. Si la cuota madrileña había caído con la salida de Lucía Figar e Ignacio González, por sus problemas con la Justicia, ahora Cifuentes consolida su poder en el partido con la inclusión de su mano derecha en el Gobierno autonómico, Ángel Garrido, y Jaime González Taboada, que también forma parte del Ejecutivo de Cifuentes como consejero de Medio Ambiente.
Cifuentes ha anunciado que convocará el próximo martes a la gestora del PP madrileño, donde podría desvelar su candidatura a la presidencia del PP de Madrid. Ya hay un candidato, Luis Asúa, presidente del PP de Chamberí, que disputará en primarias el liderazgo del PP madrileño.
En el capítulo de las ausencias del congreso, la más notable ha sido la de Ana Botella y José María Aznar, cuya imagen sólo ha aparecido unos segundos en el vídeo que repasaba la historia del partido. Tampoco se ha visto por la Caja Mágica al exministro de Exteriores ni a Federico Trillo, recién incorporado al Consejo de Estado.