Fuentes universitarias han señalado a Europa Press que el rector no ha profundizado sobre las causas que motivan esta investigación y que su intervención se ha basado fundamentalmente en aludir a las medidas tomadas sobre otros aspectos que han suscitado polémica en torno a la URJC.
En este sentido, Ramos ha aludido a la polémica suscitada por el convenio de gestión del hangar de la URJC en Fuenlabrada o las explicaciones sobre la destitución del antiguo director de la Fundación Clínica Universitaria, cargo contratado por el exrector Fernando Suárez, tras conocer que tenía un sueldo de 300.000 euros anuales.
La URJC ha informado en una nota de prensa de que el rector ha comunicado la apertura de la investigación sobre los estudios de Casado, que se enmarca en el resto de procesos abiertos por la institución.
Esta semana, el rector ordenaba a la jefa de la Inspección de servicios la apertura de una información reservada sobre los estudios de Casado y sobre el caso de un alumno del máster de Derecho Autonómico, Álvaro Morente Hidalgo, “distintos a los que están siendo investigados por la Justicia”, y por el que está imputado por presunta falsificación de documento público en la causa del máster de la expresidenta de la Comunidad Cristina Cifuentes.
Por otro lado, el informe del rector de la URJC a causa de las informaciones sobre presuntas irregularidades ha apelado al compromiso con la universidad y a la actuación “justa y honesta”, por una apuesta por la transparencia y de “firmeza para erradicar comportamientos irregulares”.
Así, según ha señalado Ramos, se conseguirá “recuperar la confianza y demostrar a la sociedad el buen nombre, la dignidad y el prestigio que la Universidad Rey Juan Carlos sabemos que tiene”.
“Creo que es injusto que, por el comportamiento de unos pocos, se ponga en cuestión la labor de todos los miembros de esta institución. No nos merecemos que, de las múltiples facetas de la universidad, el foco se ponga solo en las negativas. Pido a los distintos actores sociales que reflexionen y que piensen si la imagen que están dando de la universidad es justa y equilibrada”, ha apostillado.
Por otro lado, y en una clara referencia al caso del máster de Cifuentes, el rector ha asegurado que los miembros de la universidad saben que “han existido comportamientos irregulares” en la institución y que se conseguirá volver a la “normalidad” mediante dos ejes fundamentales.
“El primero, dejar clara ante la sociedad nuestra firmeza para combatir las irregulares y para evitar que estas puedan volver a producirse. Y el segundo, apostar con más fuerza que nunca, por una docencia y una investigación de calidad que reviertan positivamente en nuestra sociedad”, ha enfatizado.
Finalmente, ha avanzado que se redactará un código ético específico para la URJC que, cuando esté listo, se someterá a la aprobación en el Consejo de Gobierno.