La polémica sobre los recortes que van a sufrir las becas Erasmus continuará viva a lo largo de las próximas semanas. El PSOE acaba de registrar en el Congreso una interpelación urgente al ministro José Ignacio Wert en la que le piden que asuma “responsabilidades políticas” no solo por la fuerte polémica que desató tras anunciar que retiraba las ayudas a esas becas, que luego se vio obligado a rectificar, sino por toda su gestión al frente de Educación y Cultura. A la interpelación seguiría la siguiente semana una moción de reprobación para la que el PSOE busca ya los apoyos de los demás grupos de la oposición que votaron a favor –salvo UPyD que se abstuvo- en la primera reprobación que presentaron contra Wert hace ahora justo un año.
La intención del PSOE es que la interpelación -a la que debe asistir el ministro- pueda debatirse coincidiendo con el 20-N, precisamente el día en el que el pleno del Senado aprobará las enmiendas que han introducidos los grupos de la Cámara Alta a LOMCE, y fecha del segundo aniversario del triunfo del PP en las elecciones generales. La siguiente semana se debatiría y votaría una moción, consecuencia de la interpelación, en la que los socialistas incidirán en que si el ministro no dimite, Rajoy debe destituirlo.
Para que finalice con éxito esta nueva reprobación, el PSOE quiere contar con el apoyo de los demás grupos de la oposición para lo que ya ha iniciado una ronda de conversaciones. El portavoz de Educación, Mario Bedera, está convencido de que podrán conseguirlo aunque las relaciones con Cayo Lara, portavoz de la Izquierda Plural, están algo tensas ahora, después de que un grupo de exdirigentes de IU anunciara su colaboración en la Conferencia Política del PSOE, celebrada el pasado fin de semana, noticia a la que el propio Rubalcaba se ocupó de darle bastante bombo y platillo.
Es la segunda vez que Wert tiene que afrontar una reprobación en el Congreso. En octubre de 2012 el PSOE ya presentó una Proposición no de Ley en la que le pedía también “responsabilidades políticas” después de que el ministro afirmara que el interés del Gobierno era “españolizar a los alumnos catalanes”, lo que provocó una catarata de criticas, sobre todo de los nacionalistas de CiU y de ERC. En aquella ocasión, fue la número dos de Rubalcaba, Elena Valenciano, quien se enfrentó en el pleno del Congreso al ministro al que acusó de querer “dilapidar la educación y la cultura” y hacer de ambas “un laboratorio para experimentar”. A aquella reprobación no asistió Wert ni ningún miembro del Gobierno. Fue respaldada por todos los grupos parlamentarios, excepto por UPyD, que se abstuvo, y el PP que, evidentemente, votó en contra. La formación de Rosa Díez tampoco se sumó a la foto unitaria en la que este verano todos los grupos se comprometieron a derogar la LOMCE si en la próxima legislatura el PP no obtenía mayoría absoluta.
Ahora los socialistas creen que hay muchos más motivos para pedir al ministro que se vaya o para que Rajoy le cese. Bedera, el portavoz en Educación del PSOE, considera que el ministro ha ido acumulando toda una serie de “despropósitos” casi imposibles de superar. Y no solo por su política en Educación, por la que ha tenido que afrontar ya dos huelgas generales en las que han participado todos los sectores, desde sindicatos, profesores, padres, madres y alumnos. Sino también como ministro de Cultura. Bedera destaca la subida indiscriminada del IVA al 21% “lo que pone en riesgo la viabilidad de muchas industrias culturales”, y sus “infortunadas” declaraciones sobre el cine. Por todo ello, cree que Wert “debe marcharse a su casa cuanto antes”