La hegemonía de Geert Wilders como líder de la extrema derecha holandesa está en peligro, según varias encuestas publicadas esta semana en Holanda, que atribuyen un rápido crecimiento a Forum voor Democratie (FvD), un joven partido con un discurso antiinmigración y eurófobo.
FvD conseguiría hoy ocho diputados, seis más de los que obtuvo en las elecciones de marzo, mientras el PVV de Wilders, que acaparaba casi todo el voto de la extrema derecha holandesa, mantendría los 20 diputados que actualmente conserva en el Parlamento, según una media de encuestas elaborada por el profesor de Ciencias Políticas Tom Louwerse.
Esto se debe a que el nuevo partido “consigue apoyos de personas que antes votaban al PVV, pero también es cierto que votantes de otros partidos se cambian al partido de Wilders, así que equilibra lo que ganaron en las últimas elecciones”, explicó Louwerse a Efe.
Los comicios de marzo pasado supusieron un respiro para la Unión Europea debido a que, tres semanas antes de su celebración, las encuestas pronosticaban que el PVV sería el más votado.
Sin embargo, las urnas proclamaron vencedor al liberal conservador VVD con 33 escaños mientras Wilders se quedó segundo con 20 diputados, aislado por las cuatro formaciones que actualmente negocian un acuerdo de Gobierno.
FvD se hizo conocido a nivel nacional como uno de los “think tank” (foros de pensamiento) impulsores del referéndum sobre el Acuerdo de Asociación entre Ucrania y la Unión Europea.
Tras el éxito de la convocatoria y la victoria del “no”, sus líderes aprovecharon la ocasión para convertirse en un partido político en septiembre de 2016.
FvD, al igual que el PVV de Wielders, defiende bajadas de impuestos, un referéndum sobre la permanencia de Holanda en la zona euro y el retorno de las competencias transferidas a Bruselas.
“Para el PVV la inmigración y sobre todo el islam son las dos grandes cuestiones”, mientras que FvD destaca como principal asunto “cómo somos gobernados”, explicó el profesor de Ciencias Políticas.