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Vox provoca otra bronca en Ceuta y Fátima Hamed responde: “Soy española y musulmana. Aquí no hay mayor problema que el que usted pretende crear”
El portavoz de Vox en Ceuta, Carlos Verdejo, ha utilizado este martes su intervención en la Asamblea para dar un “rapapolvo” contra el diputado de Ceuta Ya! Mohamed Mustafa. Éste intervenía en defensa de la creación de un Centro de Investigaciones Sociológicas ceutí para aumentar el conocimiento de la población de la ciudad autónoma. Verdejo, que no estaba contento con que califiquen a Vox como “extrema derecha” ni “ultraderecha” ha terminado llamándole “talibán”.
Mustafa había comenzado su intervención recriminando a Vox que intente alimentar la tensión enfrentando a los ciudadanos en Ceuta como en el resto del país. “Debemos reconocer que la irrupción de la extrema derecha en las instituciones ha marcado un punto de inflexión”, ha asegurado. Uno de los ejemplos que ha mencionado han sido las polémicas por las celebraciones tras las victorias de Marruecos en el último Mundial de Fútbol.
Antes de que llegara la aclaración de Fátima Hamed, la diputada del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía que ya ha protagonizado enfrentamientos anteriormente con Verdejo. Éste ha acusado a Mustafa de ser “marroquí encubierto”, no ceutí y, por tanto, de no ser español. “Esos ceutíes existen, son españoles, no como usted, y nos votan. ¿Ustedes son marroquíes encubiertos? Sí, señor Mustafa”, ha dicho Verdejo.
Mustafa ha protestado desde su escaño, situado frente al de Verdejo, y ha pedido a la presidencia de la Asamblea que aplicara el reglamento. El portavoz de Vox le ha respondido: “Ahora aguante el rapapolvo señor Mustafa. Aguante que llevamos aguantándole a usted en silencio muchos minutos. No se puede con un talibán”.
La Asamblea de Ceuta ha ofrecido así otro ejemplo de la dificultad de moderar los debates parlamentarios en los que Vox cruza la línea entre la diferencia de argumentos y el insulto, y el político en la diana de esos ataques pide que se aplique el reglamento, que se registre en acta, que consten las palabras pronunciadas. Vertido el insulto e interrumpido el debate, ¿es mejor seguir adelante y continuar, o no?
Nadie ha dado aún con la respuesta, pero esta parece aún más difícil de encontrar cuando los responsables de moderar situaciones como esta ni siquiera están en la sala. En esta ocasión, el presidente de la Asamblea se lo había perdido. La retransmisión del debate le mostraba sentándose en su puesto cuando el diputado de Ceuta Ya! pedía su intervención.
Mustafa ha intentado hacerse oír con el micrófono apagado: “Es intolerable. Aplíquenle el reglamento o van a conseguir lo que quieren, que es reventar esta Asamblea. Me acaba de llamar talibán”.
Verdejo ha contestado: “Y lo repito: talibán”.
Mustafa ha seguido: “Es necesario que la presidencia llame al orden, porque es intolerable”.
El Presidente ha explicado por qué no estaba en la sala: “Estaba fuera atendiendo una necesidad fisiológica”.
Pero también que no aprueba los insultos: “Es una falta de respeto”.
Y Verdejo aprovechaba que tenía el micrófono abierto –y altavoz– para increpar al presidente: “¿Quiere dejar de entrar en valoraciones políticas?, y quejarse por haber abandonado la sala: ”Usted se va a hacer necesidades fisiológicas mientras recibimos una serie de insultos, con insinuaciones de todo tipo y usted no ha dicho nada“.
La calma ha regresado, relativamente, con la intervención de Hamed, que ha comentado que el Centro de Investigaciones Sociológicas “habría que crearlo precisamente para estudiar a individuos con este tipo de patologías”, en referencia a Verdejo. Según la diputada ceutí, el incidente de hoy “recuerda por qué alertamos al principio de la legislatura por qué era necesario aplicar el reglamento”.
Hamed se ha dirigido después a Verdejo para explicarle que tiene “un grave problema de identidad” y que “algo pretende hacer usted para perjudicar a toda la ciudad”. La diputada lamenta que tenga que recordarle “constantemente” que es española. “Quien le habla es de nacionalidad española, es ceutí con muchísimo orgullo, soy musulmana y soy de origen marroquí, porque mis bisabuelos lo eran”, le ha contestado. “¿Qué problema hay, tengo que avergonzarme por eso? ¿Tendría que avergonzarme si mis orígenes fueran italianos, franceses, portugueses?”.
La diputada ceutíha celebrado que Vox se esté “topando” con la realidad de una ciudad en la que “nos respetamos” y donde “quien no convive, coexiste de manera respetuosa”. Hamed le ha recriminado a Verdejo que “no hay mayor problema entre la gente más que aquellos problemas que usted pretende crear”. Pero entonces, según se aprecia en la retransmisión, Verdejo ya no estaba escuchando. “Evidentemente se tiene que ir, no puede soportar que se le diga la verdad, prefiere dar la espalda”, ha añadido la diputada.
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