El Ateneo de Sevilla regala ventiladores a “las familias con problemas” porque “consumen menos y son más sostenibles”

Recibidor del Ateneo de Sevilla: gente en traje atendiendo a los medios, unas cajas de ventiladores a sus espaldas, y al fondo, en una salita, esperan sentados los que al presidente del Ateneo le gusta “titular como familias con problemas”.

Con el patrocinio de la Obra Social de CaixaBank y la ayuda de Cáritas, en el Ateneo se han repartido en estos días alrededor de 100 ventiladores a familias “de Sevilla en general, pero prestando especial atención a las de los barrios deprimidos”. Una campaña que el presidente del Ateneo, Emilio Boja, ha definido como “una tradición”, ya que llevan varios años llevándose a cabo desde la institución.

Las familias que van a recoger su ventilador, de pie o de mesa, según les toque por orden de llegada, recibieron la llamada de Cáritas en sus correspondientes barrios para acercarse a por el mismo. Esperan en una sala al fondo del recibidor y tienen que ir pasando en orden de fila, y mostrando su DNI, para que se les otorgue el obsequio con el que “podrán combatir la calor en Sevilla a bajo coste, que además este año ha empezado muy pronto”.

“Son más sostenibles y consumen menos”

Ante la duda de por qué un ventilador para resolver los problemas de pobreza energética, combinados con las altas temperaturas de Sevilla en esta época de muchas familias sevillanas, la respuesta de la representante de La Caixa presente en el acto es que “son más sostenibles y además consumen menos, incluso nosotros teniendo aire acondicionado usamos ventilador por los mismos motivos”.

Esta iniciativa otorga, normalmente, un ventilador por familia, quienes, en palabras de los organizadores de la campaña “cualquier ayuda la reciben con alivio”. Defienden el buscar “una transformación social” a través de estos gestos y campañas para las familias que “por desgracia” se encuentran en estas situaciones.

“Que te regalen un ventilador y no vengas”

Iban tachando en sus listas los nombres de las personas a las que habían llamado y se habían acercado a por su ventilador, pero al parecer, no todas estaban acudiendo. “Que te regalen un ventilador y no vengas”, se ha escuchado murmurar a alguna de las organizadoras ante la situación.

Por su parte, los vecinos de diferentes barrios sevillanos que se acercaban al Ateneo se mostraban aliviados porque “al menos tenemos algo para poner el salón o en la cocina, porque si no, la calor en Sevilla dentro del piso en el que vivo es verdaderamente insoportable”.