El Hospital Militar de Sevilla ya tiene en funcionamiento su novena planta dedicada a lesionados medulares. Este mes de marzo ha comenzado a andar un proyecto que agrava la crisis de plantilla que sufre este centro hospitalario desde que reabriese en febrero de 2021, según denuncian trabajadores y sindicatos. Si la pasada semana nadie acertaba a decir qué personal trabajaría en esta nueva unidad, ahora lo que se sabe es que no está dotada con nuevos trabajadores, sino que en ella están quienes ya realizaban labores en el mismo hospital. O lo es que es lo mismo: más trabajo para la misma plantilla.
Se trata por lo tanto de la apertura en falso de una unidad para lesionados medulares que llegan en su mayoría del Hospital San Juan de Dios de Bormujos, también en Sevilla. Este centro es privado y su personal, aunque no es estatutario y es laboral, suma puntos en el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Una cuestión que no agrada a fuentes sectoriales consultadas ya que algunos de estos profesionales han pasado a engrosar la plantilla del Hospital Militar para complementar la oferta de esta nueva unidad. Lo que supone, opinan, una “privatización encubierta” del personal ya que proceden de un lugar de gestión privada al que acceden mediante un contrato normal, al contrario de lo que ocurre con los trabajadores del SAS.
Sin embargo, el grueso de la problemática no está ahí, sino en que el Hospital Militar de Sevilla haya estrenado su novena planta de lesionados medulares sin que en realidad se haya contratado a personal para dicha función. El propio SAS reconoce que se ha recurrido sobre todo a personal de Enfermería que estaba haciendo funciones Covid en este centro hospitalario para trasladarlo a esta nueva unidad. Que no es una “reubicación”, sino que se les traslada porque ahora tienen “menos carga de trabajo”. Pero para los trabajadores y sindicatos esta explicación no es suficiente ya que pone de manifiesto la precariedad laboral de la plantilla del Hospital Militar.
Sin plantilla fija
Desde que reabriese en febrero de 2021 tras estar cerrado durante 17 años, este hospital solo tiene plantilla eventual y no hay nadie fijo. Si bien es cierto que su apertura se produjo para ser utilizado como un centro para acoger a pacientes de Covid-19 en un principio, al más puro estilo Hospital de Zendal de la Comunidad de Madrid, el paso del tiempo ha ido dejando hueco a nuevas unidades como la de lesionados medulares que ya funciona en la novena planta. Sin embargo, pese a que el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, el consejero de Salud, Jesús Aguirre y el gerente del SAS, Miguel Ángel Guzmán, anunciaron hace un mes el estreno de esta especialidad, lo cierto es que en el ambiente del hospital flota la sensación de que lo único que se ha hecho es reubicar a parte de la plantilla para inaugurarla.
María Bueno, sanitaria del centro y miembro de UGT Salud, confirma que, como se temían, “los profesionales son de otras plantas y servicios”. “Todo el personal de este hospital es eventual porque aún no está presupuestado. Ya hace más de un año que se inauguró y si bien es normal que en un principio se hicieran los cosas con prisas por la pandemia, ahora se están abriendo plantas de otros servicios como Medicina Interna, o el caso de los lesionados medulares, sin ninguna previsión”. Un encaje de turnos y cuadrantes de plantilla que hace que sea prácticamente el mismo número de trabajadores que había para hacer aún más tareas. Además, por si fuera poco, Bueno afirma que en esta unidad no se ha llevado a personal especializado.
Desde el sector llevan semanas manteniendo reuniones para hacer hincapié en la falta de profesionales que sufre el Hospital de Militar, lo que contrasta con el que hecho de que se le incremente la carga de tareas. Las reuniones se mantienen sobre todo con la dirección del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, centro al que está adscrito el Militar por formar parte de él. Una cuestión que es importante para entender por qué la plantilla es eventual y no se ha hecho una estructura fija. Tal y como explica Rafael Ojeda, presidente del Sindicato Médico de Sevilla, dado que el Hospital Militar pertenece al del Virgen del Rocío y solo hay una dirección gerente, como no hay una plantilla estructural en el Militar, se acaba recurriendo a la del Virgen del Rocío. “Es siempre insuficiente”.
Una “vergüenza”
En este contexto, como el personal pasa de un centro a otro, se producen problemas de falta de trabajadores tanto en el Militar como en el Virgen del Rocío. “Es una vergüenza que el Militar lleve meses dotado de personal eventual y que esto no se frene con plantillas estructurales”. Como no se puede contratar a nadie fijo y ni siquiera se pueden dar interinidades, al final se produce una fuga de sanitarios. “Acaban yéndose a otras provincias, a otras comunidades, a otros países o a la sanidad privada porque se les hacen contratos de meses”, insiste Ojeda. Un aspecto que conocen bien en el Sindicato SATSE de Enfermería. Esta central sindical lleva meses pidiendo esfuerzos al SAS para evitar la fuga de talento. José Sánchez, su portavoz, recalca que con el Hospital Militar se vuelve a poner de manifiesto la “improvisación” de Salud con los trabajadores.
Juan José Limones de CCOO confía en que la Junta de Andalucía acabe recapacitando y que se incorpore a nuevo personal del SAS para cubrir la novena planta de lesionados medulares. Pero en todo caso, serán siempre temporales. Fuentes de CSIF sostienen que estos traslados en realidad se pueden deber a que la Consejería de Salud tiene “sobredimensionada” la plantilla del Hospital Virgen del Rocío. “Se contrató muchísimo por las bajas temporales y aislamientos COVID que han caído en picado y creo que se están reordenando viendo a ver qué sobra y dónde y si les da para el Militar no van a contratar”, explica Victorino Girela de CSIF. El mismo portavoz confirma que van a exigir “que se contrate todo lo necesario para que los servicios puedan atender con normalidad las necesidades, sin sobrecargar a los profesionales que ahora mismo están contratados”. “Estaremos muy atentos”.
Por su parte, fuentes del SAS, además de negar que se trate de una “reubicación de personal”, sí confirman que se ha contratado a personal externo del Hospital San Juan de Dios de Bormujos. Mientras que sobre la cuestión de por qué no se ha hecho aún una estructura fija de personal en el Hospital Militar, se limitan a recordar que este centro no tiene gerencia y que depende del Virgen del Rocío que ejerce como hospital matriz. No obstante, el sector sanitario recuerda que la Consejería de Salud es la que debe velar porque la plantilla de una instalación pública como esta pueda tener a trabajadores ligados a ella de forma fija. “En un año que lleva abierto han tenido tiempo para hacer los trámites necesarios”.