Sinsentido Común será un blog de política ficción en el que contaremos cosas que no son reales (aunque lo parecerán y jugaremos a parecer que lo sean, ¿vale?, ese es el pacto).
Ficcionaremos la realidad para que dé más risa aún de lo que ya por sí da. Risa floja, risa histérica, media sonrisa o risa congelada. Eso ya nos lo irán diciendo ustedes (la cara que se les queda al leerlo).
Un blog editado por Silvia Nanclares, Felipe G. Gil y Guillermo Zapata.
En Sinsentido Común nos hacemos eco de un nuevo mail llegado a nuestro buzón. En esta ocasión se trata de un pánfleto de la “Asociación de Víctimas de los Derechos Humanos”
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“Los Derechos Humanos no han traído más que desgracias a la humanidad, limitando su derecho a defenderse, generando falsas igualdades y disputas artificiales sobre territorios y libertades. Ya es hora de poner freno a esta lacra como ciudadanos libres y conscientes.
Algunas de las atrocidades que defiende esta declaración son las siguientes.
“Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona” Art. 3.
Si todos tuviéramos derecho a matarnos a todos de forma libre y democrática, sin injerencias del Estado o de grupos violentos, nuestra sociedad estaría razonablemente bien repartida. Habría una primera fase en la que quienes tuvieran más armas prevalecerían sobre aquellos que no tuvieran, pero sería temporal, porque los mataríamos.
“Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes” Art. 5.
¿Por qué no? Si alguien hace daño a alguien de mi familia quiero poder hacerle daño. ¿No tengo derecho a hacérselo? ¿A caso no puedo yo hacer sufrir a quien me ha hecho sufrir? ¿Quién decide eso? ¿Un político corrupto al servicio de quien sabe qué intereses?
“Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley” Art. 7.
Fijaos en la locura que plantea este argumento: la víctima y el verdugo igualados ante la ley. Dotados de los mismos derechos quien mata y quien es matado, quien insulta y quien es insultado. ¿Esa es la protección que los españoles de bien tenemos que esperar de la Declaración Universal de Derechos Humanos?
“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión” Art. 18.
He aquí otro nuevo ejemplo: ellos pueden llamar a matarnos a nosotros, pero nosotros no podemos llamar a matarles a ellos. Quitémonos las máscaras de la impostura civilizatoria.
La justicia viene de la posibilidad real de hacérsela pagar a quien nos ha hecho daño, lo demás son mecanismos para reprimir nuestros sentimientos.
El ejército de burócratas, terapeutas y bufones no va a restituir el orden. El perdón siempre lo entrega quien pierde y no vamos a perder.
¡Únete a la Asociación de Víctimas de los Derechos Humanos!
¡Los medios y los fines son retórica!
¡Defiende tu dolor como un arma!"
En Sinsentido Común nos hacemos eco de un nuevo mail llegado a nuestro buzón. En esta ocasión se trata de un pánfleto de la “Asociación de Víctimas de los Derechos Humanos”
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