“Los científicos británicos nos están ayudando mucho a los extranjeros tras el Brexit”
Reino Unido ha iniciado el procedimiento de separación de la Unión Europea. Este nuevo escenario presenta muchas dudas sobre cómo se van a abordar todos los proyectos que hasta ahora se llevaban a cabo conjuntamente y abre un periodo de incertidumbre para los trabajadores extranjeros que se encuentran actualmente en el país, entre los que hay cerca de 5.000 científicos españoles. Hablamos sobre esta situación y sobre la posibilidad de que estos investigadores terminen volviendo a España con la presidenta de la Sociedad de Científicos Españoles en Reino Unido (CERU), María Jiménez Sánchez, que trabaja como investigadora en el King’s College de Londres.
Hace unas semanas Theresa May firmó la carta para activar el Brexit. ¿Cómo están viviendo los científicos españoles esta situación?
Pues la verdad es que estamos viviendo un periodo de mucha incertidumbre y, aunque vamos conociendo un poco más del proceso, aún faltan muchas cosas por decidirse. En la CERU hemos hecho una encuesta entre los socios y la verdad es que los resultados muestran que la mayor parte cree que el Brexit puede afectarles de manera bastante importante tanto a nivel profesional como personal.
¿En qué sentido?
Parece que el Gobierno británico ha optado por un Brexit un poco más duro de lo que hubiéramos querido, lo que aquí llaman el hard Brexit. Esto implica que no habrá libertad de movimiento para los trabajadores comunitarios y estas restricciones de movilidad pueden traer problemas para muchos investigadores, porque entre un contrato y otro puede que no puedan permanecer en el país. Además, esto elimina la facilidad que tenían los españoles para venir y puede que dificulte el proceso que tendrían que seguir las universidades, los centros de investigación o las empresas para contratar investigadores que no sean británicos.
¿Y eso no preocupa a la comunidad científica británica?
Mucho. Reino Unido cuenta con un 28% de académicos que no son británicos y un 16% son de la UE, aunque en los centros de prestigio este porcentaje supera el 20%. La primera ministra Theresa May ha asegurado que la ciencia va a seguir siendo una prioridad en el Reino Unido y que va a seguir tratando de atraer el talento extranjero. Obviamente el Gobierno tiene que hacer esfuerzos por preservar a estos investigadores, porque somos mano de obra muy cualificada y que venimos ya formados. Aunque todo esto es bastante hipotético.
¿Cuántos investigadores españoles hay en Reino Unido?
Según los datos de las universidades británicas unos 3.500 investigadores españoles trabajan en la universidad, pero estos números no tienen en cuenta los centros de investigación fuera del ámbito universitario, ni los centros privados. Teniendo en cuenta esto estimamos que hay unos 5.000 investigadores españoles trabajando actualmente en Reino Unido.
¿Han encontrado apoyo entre los científicos británicos?
Sí, desde la comunidad investigadora y universitaria el mensaje es muy positivo y muy favorable a Europa, porque saben que dependen de ellos para mantener el nivel que han tenido hasta ahora. Las universidades ya han dicho en varios comunicados que están dispuestas a mantener el nivel de internacionalización que han tenido hasta ahora y están ayudando mucho a los investigadores extranjeros, ofreciendo apoyo e información en varios aspectos legales, como dar asesoramiento para conseguir la residencia permanente.
Supongo que también estarán preocupados por perder la financiación europea.
Por supuesto. Si Reino Unido no está en la UE, los científicos que trabajen aquí tendrían muchas limitaciones a la hora de pedir financiación europea, que es un porcentaje bastante importante. Además, no solo es financiación, también se limitaría la participación en los proyectos colaborativos. El Reino Unido se podría quedar fuera de los grandes consorcios de investigación, lo que afectaría muchísimo a la competitividad de la ciencia británica, que ahora mismo es uno de los líderes europeos y mundiales.
Por último, estar fuera de la UE no es solo estar fuera de la financiación y de los proyectos, sino que también implica quedarnos sin la opción de optar a algunas ayudas individuales muy prestigiosas como las del European Research Council. Esto significa que muchos investigadores de gran nivel preferirán investigar desde países en los que sí se pueden pedir estas ayudas.
¿Esta situación de incertidumbre le ha hecho pensar en volver a España?
No, a corto plazo no voy a volver, porque ahora mismo tengo un contrato de cinco años que me permite formar mi propio grupo de investigación y contratar personal y esto es una oportunidad que no existe en España ahora mismo. Creo que aquí las condiciones son muchos mejores y las posibilidades de encontrar este tipo de ayudas para investigadores jóvenes son prácticamente inexistentes en España.
Pero están los contratos Ramón y Cajal.
Sí, es el equivalente en España, pero esos contratos te dan un salario y apenas algo de financiación para realizar un proyecto, mientras que aquí el Gobierno se asegura de que tengas las condiciones necesarias para desarrollar tu investigación.
Entonces ¿cree que España no tiene las condiciones adecuadas para atraer de nuevo a los investigadores?
Creo que España claramente tiene un problema, porque no tiene las condiciones para acoger a investigadores y no es para nada tan competitivo como el Reino Unido. Ahora mismo muchos científicos españoles se tienen que ir fuera y, en muchos casos, los que se van ni pueden ni quieren volver y eso no lo podemos ignorar.
El gobierno dice que no hay fuga de cerebros, que lo que hay es “movilidad”.
No estoy de acuerdo con la afirmación de que la fuga de cerebros no existe. Está claro que es bueno que haya movilidad, porque la ciencia es internacional. Yo me vine a hacer un posdoc en el Cambridge Institute of Medical Research porque quería mejorar mi experiencia, viendo nuevos laboratorios y nuevas formas de trabajar. Pero la movilidad tiene que tener un balance neto positivo y eso no sucede en España. El problema no es solo que no vuelvan los españoles, sino que, como he dicho antes, somos incapaces de atraer talento. La idea es que al menos entren los mismos que se van, que España se convierta en un país al que los mejores investigadores quieran ir porque haya medios y ese no es el caso.
¿Y en Reino Unido es más fácil?
Sí, aunque no hay que olvidar que la ciencia es muy competitiva y que no es fácil conseguir una plaza, pero al menos aquí el investigador que es bueno tiene cabida, mientras que en España lo tiene más difícil.
Entonces ¿cree que habría que fomentar la inversión en ciencia en España?
Sí, pero no solo porque se te escapen cerebros y hayas perdido la inversión realizada en formar a esa persona, es porque si inviertes en investigación, inviertes en el futuro del país. Crear una red de investigación potente es fomentar la economía y ser más competitivos, que es a lo que tendríamos que aspirar.