España supera los 10 millones de contagios en la pandemia
España ha alcanzado los 10 millones de contagios desde el inicio de la pandemia del coronavirus, según la última actualización de datos del Ministerio de Sanidad, aunque la mitad de los infectados en los dos últimos años se han diagnosticado en la sexta ola. Dos años después de la detección del primer caso en La Gomera, España cruza otro rubicón que ya han sobrepasado países vecinos como Francia e Italia en los últimos días.
Concretamente, se han sumado 77.873 nuevos contagios desde la última jornada y 408 fallecimientos por COVID. Sin embargo, este aumento de los decesos puede deberse a un efecto estadístico por Euskadi, que suma 128 muertes, y llevaba días sin actualizar el número de fallecidos.
Casi todo, sin embargo, incluso el virus, ha cambiado desde entonces. Con más de un 80% de la población vacunada (el 45% con dosis de refuerzo) y 90 millones de inyecciones administradas, el número de fallecidos es muy inferior a otras olas, aunque haya crecido junto al número de casos, hasta superar el centenar de muertos al día.
Al Ministerio de Sanidad le constan 93.633 fallecimientos registrados por coronavirus hasta la fecha, aunque la cifra será mayor, con 408 nuevos decesos notificados en este último informe. Si en la primera ola se concentraron uno de cada tres muertos en la pandemia hasta el momento, la sexta suma el 5,5%, según los datos de Sanidad. Con más del triple de contagios que en la tercera ola, la última en la que la población aún estaba sin inmunizar, los fallecimientos no llegan a un tercio de los que se produjeron entonces. Pese a que la situación es ahora más favorable, el conjunto de las olas, hasta seis, han dejado la mayor crisis de mortalidad desde que existen registros en España.
Este martes se notifica una nueva bajada de la incidencia, que desciende hasta los 2.694,44 casos, 185 puntos menos que el lunes. Pero si hay algo que ha demostrado la sexta ola es que el virus es imprevisible. Que puede mutar, reproducirse y generar una explosión de contagios leves sin precedentes incluso con una población blindada por la vacunación.
El 21 de enero, España registró el récord de incidencia acumulada (3.418 casos por cada 100.000 habitantes), aunque probablemente el pico de ese día se debió a un efecto estadístico. Desde el 2 de noviembre la incidencia empezó su tendencia al alza de nuevo hasta alcanzar las cifras más altas en toda la pandemia. En ese momento comenzó la última sexta ola del coronavirus, aunque desde hace días la curva consolida una tendencia ya clara a la baja tras dos meses de ascenso pronunciado.
No se notificaban cifras tan bajas de contagios como la de este martes desde el 23 de diciembre, justo antes de Navidad. En ese momento, las cifras diarias de casos distaban mucho de las que se registraban tan solo unos días después. Solo entre el lunes 27 de diciembre y el lunes 10 de enero se registraron dos millones de positivos.
Los hospitales, salvo cambios imprevisibles, también parecen en fase de estabilización aunque con una presión importante por el estallido de casos. Según los datos que maneja Sanidad, cerca de 500.000 personas han pasado por el hospital desde marzo de 2020. El 11,8% tuvo que ser ingresado en la sexta ola, frente al 23% en la primera ola. La presión hospitalaria ha vuelto a descender este martes, y el porcentaje de camas ocupadas pasa del 15,05% al 14,52%.
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