El papa Francisco desconfía de la autenticidad de las apariciones marianas en la localidad bosnia de Medjugorje, según reconoció en el vuelo de regresó tras su visita al santuario de Fátima en Portugal.
En la tradicional rueda de prensa a bordo del avión, los periodistas, entre ellos EFE, le preguntaron a raíz de la celebración del centenario de las apariciones en Fátima cómo estaba la situación en el caso de Medjugorje, donde la Iglesia aún no se ha expresado.
Francisco recordó que Benedicto XVI ya se ocupó del tema e hizo realizar un informe al cardenal Camillo Ruini que después se envió a los miembros de la Congregación para la Doctrina de la Fe (El ex Santo Oficio), que “nutrieron dudas” sobre la autenticidad de las apariciones marianas.
El papa también precisó que ante las primeras apariciones en 1981 a algunas jóvenes “se debe seguir estudiando”, pero que sobre las actuales todos “tienen dudas”.
“Yo personalmente soy más malo” , destacó, y agregó: “Yo prefiero a la Virgen madre y no la madre que parece jefe de la oficina de telégrafos y va mandando mensaje todos los días”, añadió.
Aunque destacó que hay que tener en cuenta el aspecto “pastoral y espiritual” de ese santuario, donde la gente acude en masa desde varias partes del mundo.
Ante ello recordó que recientemente nombró como enviado especial al arzobispo polaco Henryk Hoser con el objetivo de adquirir información profundizada sobre la situación pastoral de esa realidad.
“Después de esto ya diremos algo”, anunció el pontífice.