Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE
Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.
Nutrias, barbos y demás especies castizas a la (re)conquista del Manzanares
El ánade real, el barbo o la nutria, recientemente avistada por primera vez, son algunas de las especies que han conquistado el Manzanares a su paso por Madrid tras el plan de renaturalización del Ayuntamiento, que ha dotado al curso medio del río de una vida biológica sorprendente para una gran ciudad.
“El río ahora parece un río”, resume a Efe Francisco José García, biólogo del grupo de seguimiento de la biodiversidad de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) que hace unas semanas logró filmar la prueba definitiva de la resurrección ecológica del Manzanares: una nutria nadando al lado del estadio Vicente Calderón.
El vídeo y las fotografías de García demuestran el impacto conseguido por el plan de renaturalización del Manzanares emprendido en 2016 por el anterior gobierno municipal de Manuela Carmena, que ha favorecido una regulación más natural de su caudal y la aparición de isletas y vegetación a lo largo de su recorrido.
“El río tal y como está es una medalla que los madrileños deberíamos lucir con orgullo”, afirma García, quien explica que Madrid y su cinturón industrial habían representado, al menos desde los años 80, una barrera insalvable para la nutria.
No obstante, la especie se detectó hace alrededor de una década en las inmediaciones de El Pardo, y desde que se abrieron las compuertas del río empezaron a verse huellas y excrementos del mamífero hasta la altura del puente de Segovia.
Esta primavera, García consiguió grabar “por casualidad” a un macho de algo más de un metro de longitud que nadaba río abajo.
“Ya podemos decir que tenemos una nutria cien por cien castiza en la ciudad de Madrid”, celebra el biólogo, que confía en que una hembra pueda instalarse en el área dominada por el macho (que puede extenderse hasta 40 kilómetros) y llegar a criar.
Para el portavoz del área de aguas de Ecologistas en Acción, Santiago Martín Barajas, la aparición de este mustélido, estupendo nadador y eficaz depredador, “demuestra la calidad del ecosistema ahora mismo”, y supone “un hito” en la historia de un proyecto que espera que se repita en otras ciudades.
La nutria quizás sea la más llamativa de las especies que han repoblado el Manzanares en los últimos años, pero no hace más que encabezar una lista extensísima.
Sobrevuelan el río mariposas, libélulas e incontables tipos de aves: pájaros moscones, chorlitejos, martines pescadores, gallinetas, ánades, gorriones, vencejos, golondrinas, garcetas, pinzones...
García siente especial predilección por los barbos, peces autóctonos que no habían habitado la ribera de la capital desde hacía tres décadas y que se caracterizan por remontar el río hacia su curso alto, como si fueran salmones, para ir a desovar.
Sin embargo, esta proliferación de vida animal no siempre resulta beneficiosa, ya que a veces llega de la mano de especies invasoras que afectan negativamente a las autóctonas.
En Madrid, apunta García, “el problema más visible es el de las cotorras”, pero en el río también abundan animales como el ganso del Nilo, que es “muy grande, muy agresivo y en cuanto empieza a criar evita que se acerque cualquier otro pájaro”, o la ya célebre carpa.
Resulta curiosa, asimismo, la presencia del visón americano, importado años atrás por granjas de peletería de la serranía madrileña y que se liberó de la cautividad “bien por escapes o bien, en algunos casos, por algunos animalistas tan informados que abrieron las puertas de las granjas y soltaron a 15.000 visones”.
La existencia de “muchas depuradoras muy potentes” y la progresiva desaparición de contaminantes de origen agrícola están, según García, entre los factores que han propiciado el desarrollo ecológico del río, que ya es, asegura, todo un reclamo para el turismo ornitológico.
Ahora pide que “los madrileños sean un poco más cívicos” y contribuyan a que la nutria 'castiza' llegue “para quedarse” en la capital.
Juan Vargas
0