La ONCE solo admite a afiliados que sean españoles
Quien quiera ser afiliado de la ONCE debe cumplir con dos requisitos: tener una discapacidad visual y ser español. La organización, que acaba de recibir el premio Príncipe de Asturias de la Concordia, solo admite a afiliados que sean españoles, bien de nacimiento, bien porque hayan obtenido la nacionalidad española. Solo las personas afiliadas a la ONCE pueden beneficiarse de todos los servicios y actividades que ofrece la organización.
Los derechos y obligaciones de los miembros de la ONCE están recogidos en sus estatutos. Solo los afiliados pueden “acceder a los servicios, prestaciones y actividades establecidos institucionalmente”, “beneficiarse en materia de empleo e integración laboral” de las acciones que contemplan los estatutos, y “recibir asesoramiento y apoyo” en caso de discriminación por su discapacidad visual, entre otros.
Entre esos beneficios en materia de empleo e integración laboral está facilitar un puesto de trabajo en el mercado ordinario o a través de la venta de los cupones u otras modalidades de juegos comercializados por la ONCE. Es decir, solo si eres afiliado puedes aspirar a un puesto de trabajo como vendedor de cupones.
Todos las personas contratadas por la organización para vender cupones son ciegas o tienen algún otro tipo de discapacidad. Un portavoz de la organización aclara que, en el caso de las personas ciegas extranjeras, también pueden acceder a estos contratos siempre y cuando cumplan con el resto de requisitos para ser afiliados. No podrán ser afiliados, pero sí vendedores. No hay, sin embargo, datos de cuántos vendedores son españoles y cuántos extranjeros. “Lógicamente, los extranjeros serán un grupo más pequeño, no es lo normal”, señala el portavoz.
En el caso de las personas con otro tipo de discapacidad sí tienen que ser españolas para poder ser contratadas como vendedoras de cupones. “Protegemos especialmente a las personas ciegas”, apunta el portavoz. Sobre las restricciones a los extranjeros, afirma que la ONCE nació para ayudar a los ciegos españoles, “por eso se llama Organización Nacional de Ciegos Españoles, a las personas extranjeras se les puede echar una mano a través de programas concretos, a un niño ciego extranjero se le apoyará”.
En junio de 2013 había 71.460 personas afiliadas a la ONCE, según los datos de la propia organización. El 51,3% eran mujeres y el 48,6%, hombres.
