Madrid, 10 jun (EFE).- El episodio de calor muy intenso e inusual para el mes de junio derivará este fin de semana en una “más que probable” y temprana ola de calor, la primera del año, que se prolongaría hasta el viernes próximo con temperaturas que en el suroeste peninsular superarán los 42 grados.
De acuerdo con los pronósticos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), “el calor será muy intenso en la Península y Baleares al menos hasta el miércoles próximo y no se descarta que se extienda un par de días más”.
Este episodio de altas temperaturas, muy poco frecuente en el mes de junio, dará lugar a “una más que probable ola de calor” que se notará sobre todo el fin de semana, cuando los termómetros continuarán subiendo de forma generalizada, según ha adelantado el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo.
De este modo, ha indicado, en los próximos dos días y a comienzos de la próxima semana en muchas zonas de España tendrán de día entre 10 y 15 grados más de lo normal para la época y de noche, de 5 a 10 grados más.
Sólo el Cantábrico, algunos puntos del interior y Canarias se librarán por ahora del calor soporífero, aunque en el archipiélago también se espera su llegada a partir del miércoles o jueves próximos.
La peor parte de este episodio de calor se la lleva Andalucía, donde ayer jueves se alcanzaron 40 grados en Montoro (Córdoba) y en Morón de la Frontera (Sevilla) y en ambas capitales de provincia llegaron a 39 grados.
Los marcadores seguirán subiendo y de acuerdo con los pronósticos de la Aemet, este viernes se alcanzarán o superarán los 35 grados en el Valle del Ebro, oeste de Cataluña, zona centro, en la ciudad de Madrid, en el extremo sur de Castilla y León, oeste de Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía y occidental.
Rondarán los 40 grados en el Valle del Guadalquivir, donde este viernes se ha activado la alerta naranja por altas temperaturas y la amarilla en los valles del Ebro y del Guadiana, que rondarán los 38 grados.
El sábado y el domingo se esperan 35 grados de máxima o más en la Meseta norte, nordeste peninsular, centro y sur; superarán los 40 grados en puntos del Ebro y en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir e incluso ciudades como Badajoz, Córdoba o Sevilla, rebasarían los 42 grados.
Las noches del fin de semana serán “tropicales” -por encima de los 20 grados- en la costa mediterránea, Cuenca, zona central del Ebro, centro y amplias zonas de Andalucía y no se descarta que lleguen a ser “tórridas” o que no bajen de los 25 grados en algunos puntos de Extremadura.
La Aemet no descarta la formación de tormentas mañana sábado en la mitad norte peninsular y en puntos de Castilla y León, que podrían ser localmente fuertes; cielos nubosos, lluvias débiles y hasta 25 grados de máxima en el Cantábrico y en Baleares esperan superar los 35 grados el domingo en el interior de Mallorca.
A comienzos de la semana próxima seguirán subiendo las temperaturas en el tercio norte y área mediterránea; bajarán algo en el oeste y seguirán superando los 35 grados en la cuenca del Ebro, meseta norte, centro y sur de la península, mientras tendrán más de 40 grados en Baleares y en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir.
El lunes y el martes próximos Badajoz, Sevilla y Córdoba superarán de nuevo los 42 grados; a 40 llegarán en Alicante y Murcia, Lleida, Logroño, Zaragoza y Madrid, donde por la noche no bajarán de 22 grados frente a los 23 grados nocturnos de Zaragoza o Barcelona o los 25 de la ciudad de Jaén.
Aunque los pronósticos difieren en la previsión del tiempo a partir del miércoles 15, la Aemet asegura que “el escenario mayoritario” vaticina que el calor muy intenso se alargará al menos hasta el viernes 17 en buena parte de España.
En Canarias soplarán alisios intensos el fin de semana que arrastrarán nubes hacia Lanzarote, Fuerteventura y las islas de mayor relieve, con temperaturas estacionarias que no se descarta que suban de manera acusada a partir del miércoles o jueves en todo el archipiélago.
La Aemet advierte de que durante la ola de calor es aconsejable extremar la precaución, evitar la exposición al sol en las horas centrales del día y tener presente que el riesgo de incendios es extremo sobre todo en las zonas con más temperatura. EFE
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