Sánchez anuncia la liberalización de la patente de los test de anticuerpos del CSIC para que lleguen a países necesitados
Pedro Sánchez ha hecho un alegato en favor de “compartir conocimiento” en la lucha contra la pandemia de la COVID-19. “Se puede alcanzar un consenso para la exención temporal de la protección intelectual”, ha dicho sobre los instrumentos para combatir el coronavirus durante un acto organizado en Moncloa sobre la donación de vacunas -de las que el Gobierno ya ha entregado 30 de los 50 millones de dosis comprometidas- en el que ha aprovechado para poner a España como ejemplo. El presidente ha anunciado que el CSIC ha alcanzado un acuerdo con el Medicines Patent Pool (MPP) de la ONU para que los test de anticuerpos desarrollados por el centro público de ciencia español lleguen “a los países más necesitados”.
La alianza consistirá en el que CSIC ponga en manos de ese departamento de Naciones Unidas la “tecnología” de esos test, que tienen una fiabilidad cercana al 100% y que permite distinguir si los anticuerpos proceden de la vacuna o de haber estado en contacto con la enfermedad. Será el MPP el encargado de fabricar los test para que lleguen a los destinos, que serán países subdesarrollados o en vías de desarrollo en línea con la donación de vacunas que están llevando a cabo los países ricos.
“El reparto justo y equitativo es clave”, ha expresado Sánchez en ese acto en el que, además de defender que se comparta el conocimiento, ha apostado por “acelerar la distribución”. El presidente ha insistido en que estas son algunas de las lecciones que se extraen de la pandemia así como de la necesidad de la “cobertura sanitaria universal” y de fortalecer los sistemas públicos de salud. También ha enfatizado el “papel fundamental de la ciencia y la investigación que han permitido contar con vacuna en tiempo récord”. “Las vacunas funcionan y cuanta más gente esté vacunada menos oportunidades tendrá el virus de expandirse”, ha afirmado.
Esa es una idea que han defendido todos los intervinientes, entre ellos el director general de la OMS, Tedros Adhanom. Esa institución ha marcado como objetivo que el 40% de la población mundial esté vacunada cuando acabe el año y que el porcentaje aumente al 70% a mediados de 2022. “No estaremos a salvo hasta que todo el mundo esté a salvo”, ha dicho la comisaria europea de Asociaciones Internacionales, Jutta Urpilainen, que ha felicitado a España por su “solidaridad” al ser el quinto país del mundo en donar vacunas y el tercero de Europa. “Compartir vacunas es más que un acto de cooperación, es una estrategia para combatir al virus, es un acto de salud pública”, ha señalado la directora de la Agencia Española del Medicamento, María Jesús Llamas.
“Se puede liderar la vacunación nacional y encabezar la global al mismo tiempo. Podemos sentirnos orgullosos”, ha sentenciado Sánchez, que ha reconocido que “esta lucha no ha terminado”, como demuestran no solo los bajos datos de vacunación mundial sino también la dosis de refuerzo que España autorizará para mayores de 60 años y personal sanitario. También ha pedido a los ciudadanos que mantengan el grado de “responsabilidad” que han tenido hasta ahora con la vacunación y el uso de la mascarilla.
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