El Vaticano ha rechazado todas y cada una de las peticiones de la defensa de José María Martínez Sanz, el profesor del Gaztelueta condenado por abusos a Juan Cuatrecasas, contra el proceso ordenado por el Papa y encargado al obispo de Teruel, José Antonio Satué. La resolución no deja margen de duda y supone un duro varapalo tanto para la defensa del profesor, que ha sido destituida, como para el propio Opus Dei, cuya postura ante este caso ha sido cuanto menos tibia.
El fallo, que ha sido adelantado por El Correo y ha confirmado elDiario.es, se produjo el pasado 28 de junio, aunque no se notificó hasta la pasada semana a la defensa del profesor condenado por abusos. La resolución, firmada por prefecto de la Signatura Apostólica, Dominique Mamberti, está dirigida a la prelatura del Opus Dei y en la misma se ordena la destitución de los abogados del pederasta, que no habrían acreditado titulación académica en Derecho Canónico ni experiencia forense, por lo que carecerían “de capacidad” para representar a su cliente.
De hecho, “para garantizar una defensa competente”, instan al profesor a elegir un abogado rotal en el plazo de 30 días, en caso contrario se les designará uno de oficio.
La decisión supone un espaldarazo al trabajo llevado a cabo por el obispo de Teruel, José Antonio Satué, dado que considera “inadmisibles” la nulidad del decreto papal para abrir un proceso canónico contra el profesor puesto que el Papa “nunca puede ser recusado, ya que goza de la potestad ordinaria, suprema, plena, inmediata y universal sobre la Iglesia, sobre la cual puede ejercer libremente”
El Tribunal también rechaza las acusaciones contra el obispo de Bilbao, Joseba Segura, aunque asume que tal vez fue “poco conveniente” su nota instando al profesor condenado a pedir perdón a la familia. Finalmente, sobre la supuesta investigación llevada a cabo por Silverio Nieto, el tribunal de la Santa Sede estipula que no fue “una primera instancia de juicio”; sino simplemente una nota pericial.
La resolución no se hizo pública para tratar de no interferir con otra de las polémicas que salpican al Opus Dei en los últimos tiempos, el conflicto generado entre la prelatura y el obispo de Barbastro-Monzón por la titularidad del santuario de Torreciudad.
Consultados por este medio, la familia Cuatrecasas admite no haber recibido notificación oficial del fallo, aunque saludan el mismo, al considerar que permitirá, “por fin”, que se dicte sentencia en el campo canónico, “y que se resarza de una ver el buen nombre de nuestro hijo”. Tras el fallo de la Signatura, solo faltaría el final del proceso que, como adelantó en su día RD, estaba a punto de quedar visto para sentencia.
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