Sídney (Australia), 24 nov (EFE).- El Gobierno de Australia anunció este domingo que abandona una reforma legislativa que proponía multas por hasta el 5 % de los ingresos globales de redes sociales y plataformas digitales por difundir noticias engañosas o falsas que causaran daño grande.
En un comunicado, la ministra de Comunicaciones, Michelle Rowland, afirmó que, a pesar del apoyo popular a las medidas contra la desinformación, el Ejecutivo laborista considera que no cuenta con suficiente respaldo en el Parlamento.
“Basándonos en declaraciones públicas y contactos con senadores, está claro que no hay una vía para legislar esta propuesta en el Senado”, precisó Rowland.
En este sentido, señaló que el Gobierno retirará su proyecto de Enmienda de la Legislación de Comunicaciones (Lucha contra la Información Errónea y la Desinformación) de 2024, que fue presentado en septiembre ante el Parlamento de Camberra.
La ministra dijo que el Ejecutivo continuará otras medidas alternativas contra los ultrafalsos sexuales no consentidos, así como sobre la veracidad en las informaciones electorales y la inteligencia artificial, entre otros proyectos.
Otras iniciativas legislativas presentadas por las autoridades australianas abordan el 'doxing' (revelar información de una persona en línea sin su consentimiento), el fraude en línea y la imposición de límites de edad para acceder a las redes sociales.
El dueño de X, Elon Musk, calificó de “fascista” al Gobierno australiano por plantear este plan contra la desinformación que contemplaba grandes multas, mientras que el primer ministro australiano, Anthony Albanese, le recordó que las redes sociales tienen una responsabilidad social.