La presentación de los nuevos iPad ha mantenido el sabor habitual de los eventos de Apple y el tono que se esperaba. Sin sorpresas y acompañados de un torrente de información corporativa, han salido a la luz el iPad Air, la nueva tableta de 9,7 pulgadas rebautizada, y el iPad Mini, al que se le ha incorporado la pantalla retina. Pero antes de nada había que dar un dato sobre la joya de la corona: un nuevo récord para iPhone, nueve millones de unidades se vendieron en el primer fin de semana a la venta del smartphone. Huelga decir que los dos nuevos dispositivos también funcionan con iOS 7.
iPad Air, mejoras esperadas
Tras apuntar el CEO de Apple Tim Cook que se han vendido a estas alturas 170 millones de iPad y que ya hay disponibles 475.000 aplicaciones en la App Store, adaptadas para la tableta, se ha presentado ante el público el dispositivo. El iPad Air es un 20% más delgado que la generación precedente, con un borde de 7,5 milímetros. De nuevo, también ha reducido su peso, ahora de 453 gramos, en un 28%.
Su pantalla no cambia, cuenta con la tecnología retina, que le proporciona una resolución de 2048x1536 píxeles, y el tamaño es el de siempre, 9,7 pulgadas. Quizá la principal novedad esté en la incorporación del chip A7, el mismo que tiene el iPhone 5s, que dispone de una arquitectura de 64 bits. Esto, junto con el coprocesador M7, también presente en iPhone más puntero, permite que el rendimiento de los gráficos se duplique, según la compañía. En comparación con la primera generación de la tableta, Apple afirma que la nueva es ocho veces más rápida y los gráficos 72 veces más.
Gracias a la eficiencia del chip A7 la batería del iPad Air puede ser más pequeña sin sacrificar su vida, según ha comentado en la presentación el vicepresidente ejecutivo de diseño de la marca, Jonathan Ive. La cámara iSight de 5 megapíxeles tampoco ofrece ninguna novedad destacada, aunque se ve complementada con aplicaciones como FaceTime.
El iPad Air estará disponible a partir del 1 de noviembre en España y en otros 40 países. Se prevé que Apple vaya expandiendo el lanzamiento a otros lugares, incluido América Latina, en próximas oleadas. La tableta se podrá adquirir en blanco y en negro, desde 479 euros para el modelo de 16 GB sólo WiFi hasta los 749 euros que costará el de 128 GB, también sin conectividad móvil. Quien quiera disponer de 3G tendrá que pagar un mínimo de 599 euros (para la versión de 16 GB), la versión más equipada cuesta 869 euros, con 128 GB. Por otro lado, Apple también seguirá comercializando el iPad 2, que no cuenta con pantalla retina, desde 379 euros (sólo WiFi y 16 GB) hasta los 499 euros (con 3G y la misma capacidad).
El iPad Mini se gana la pantalla retina
Apple también ha tenido hueco para mimar a su tableta más pequeña. El iPad Mini da un salto cualitativo respecto a la primera versión gracias a la pantalla retina. Su nueva resolución es de 2048x1536 píxeles, la misma que el iPad Air, sólo que condensada en un tamaño de 7,9 pulgadas.
El nuevo iPad Mini también cuenta con el chip A7, que Apple no incorporó a su iPhone 5c, dejándole la exclusividad al modelo 5s. En esta ocasión no ha escatimado y la tableta pequeña dispone en su interior de la arquitectura de 64 bits, al igual que el iPad Air. La compañía afirma que gracias a este procesador la CPU es cuatro veces más rápida y el rendimiento de los gráficos en ocho veces superior. La cámara es la misma que la del iPad Air, 5 megapíxeles complementados con software.
La fecha de lanzamiento del iPad Mini no ha sido concretada por Apple, quien ha dicho que aparecerá “más tarde” en noviembre. En todo caso la nueva versión con pantalla retina costará 389 euros con 16 GB de almacenamiento y sólo WiFi, mientras que el modelo de 128 GB tendrá un precio de 659 euros. Si a esto se le añade conectividad móvil, la tableta se podrá adquirir desde 509 euros, la versión de 16 GB. Aún se venderá la primera generación del dispositivo, a partir de 329 euros (16 GB, sólo WiFi).
La nueva era de los chip de 64 bits
En apenas un mes Apple ha renovado sus productos móviles más punteros colocándoles el chip A7, que funciona a 64 bits. Un salto cualitativo del que se ha dicho que no tiene sentido real en los smartphones y tabletas, al menos por ahora, pues la principal diferencia con los procesadores de 32 bits es el soporte a los 4 GB de RAM o superior, un límite que aún queda lejos.
Sin embargo, Apple ya ha adaptado iOS 7 a los 64 bits y con el movimiento obliga a los desarrolladores a evolucionar sus aplicaciones si no quieren quedarse atrás. De manera que la App Store contará con una nueva generación de software, optimizado según las premisas de la marca de la manzana. El chip de 64 bits, por otra parte, pone los dispositivos móviles en consonancia con los Mac, con vistas a una futura interoperabilidad de las aplicaciones, lo que incrementaría el valor de todas las líneas de producto.
Apple ha aprovechado la ocasión para anunciar la renovación de su línea de portátiles y presentar la décima versión de su sistema operativo de sobremesa, el OS X Mavericks, que está disponible de forma gratuitadisponible de forma gratuita. El nuevo MacBook Pro dispone de procesadores de Intel de cuarta generación de doble núcleo. Su precio comienza en 1.329 euros, para la versión con pantalla de 13 pulgadas, y 2.029 euros para el modelo de 15 pulgadas.