TikTok se ha comprometido con la Comisión Europea a vigilar todos los contenidos que publican los usuarios con más de 10.000 seguidores en la plataforma para evitar que hagan publicidad engañosa dirigida a menores. También habilitará un canal de denuncia para “los anuncios que podrían empujar o engañar a los niños para que compren bienes o servicios” y ha prohibido hacer publicidad de alcohol, tabaco y esquemas “para hacerse rico rápidamente”.
Estos cambios son parte del pacto al que la red social china ha llegado con Bruselas tras recibir una denuncia masiva de organizaciones de defensa de consumidores de toda la Unión. En febrero de 2021 17 de ellas y el BEUC, el organismo comunitario que las agrupa, cargaron contra TikTok por tolerar “múltiples violaciones de los derechos del consumidor”, como los anuncios encubiertos destinados a menores.
Las organizaciones mostraron preocupación por el hecho de que los influencers de la plataforma no estuvieran identificando los contenidos que han sido pagados por marcas, lo que supone publicidad engañosa. Como señalaron, la situación se agrava por el hecho de que una gran proporción de los usuarios de TikTok son menores de edad.
La denuncia se ha cerrado con un acuerdo entre la plataforma y la Comisión Europea para aumentar la transparencia de la publicidad, ha comunicado este martes el Ejecutivo comunitario. El cambio de políticas engloba a su vez a las “monedas”, que TikTok vende para que los usuarios envíen regalos y recompensas a sus creadores de contenidos favoritos. La red social se ha comprometido ha aumentar la claridad respecto a este mecanismo y a permitir su devolución en los 14 días posteriores a la compra.
“Todas las plataformas están obligadas a jugar con las reglas y asegurarse de que los consumidores puedan identificar fácilmente el contenido comercial, incluso cuando es promovido por influencers”, ha afirmado Didier Reynders, comisario de Justicia. “A pesar del compromiso de hoy, seguiremos vigilando la situación en el futuro, prestando especial atención a los efectos en los usuarios jóvenes”, ha añadido.
“Impacto muy incierto”
El BEUC ha “celebrado” el acuerdo entre TikTok y Bruselas pero lamenta que haya aspectos de su denuncia inicial que no se hayan cubierto. Entre ellos, señala que la red china “no se ha comprometido a dejar de elaborar perfiles y apuntar a los niños con publicidad personalizada”.
"TikTok no se ha comprometido a dejar de elaborar perfiles y apuntar a los niños con publicidad personalizada"
La organización europea de consumidores señala que TikTok también se ha salvado en cuestión de derechos de autor, ya que sigue teniendo una “licencia muy amplia para hacer uso de los contenidos generados y publicados por sus usuarios”.
“El impacto de estos compromisos en los consumidores sigue siendo muy incierto. A pesar de más de un año de diálogo con TikTok, la investigación se ha cerrado, dejando sin respuesta las importantes preocupaciones que planteamos”, se ha quejado este martes la directora general adjunta del BEUC, Ursula Pachl. “Instamos a las autoridades a que vigilen de cerca las actividades de TikTok y a que adopten medidas nacionales de ejecución si los compromisos no se cumplen. Esto no debe ser el final de la historia”, ha incidido.
Desde la compañía han celebrado la decisión de Bruselas de establecer un diálogo y evitar otro tipo de acciones. “Estamos agradecidos de haber podido trabajar durante el último año en la colaboración con la Comisión Europea y las autoridades nacionales de protección de los consumidores, para revisar y hacer cambios en varias de nuestras políticas y funcionalidades”, ha afirmado un portavoz de TikTok en un comunicado enviado a este medio.
Las denuncias por publicidad encubierta no son exclusivas de los influencers que crean contenidos en TikTok. La ley que regula la publicidad en España obliga a identificar cuándo una publicación en las redes sociales está pagada por un tercero. No obstante, el sector se basa en la autorregulación de los anunciantes, por lo que las empresas y creadores que no suscriben los códigos de buenas prácticas no pueden ser perseguidos por los organismos creados por la industria para vigilar este tipo de prácticas.