Alba Carrillo ha emitido un durísimo comunicado contra los programas de televisión que, según ella, han dedicado las últimas semanas a mentir sobre su persona. “Han insinuado de una forma ridícula, grotesca y de mal gusto una serie de calumnias y difamaciones sobre mi persona para inventar contenidos con el objetivo de aumentar la audiencia en sus espacios”, denuncia la modelo, que en ningún momento alude directamente a Telecinco o Sálvame, si bien parece claro que sus quejas van contra la cadena en la que aún colabora.
Básicamente, porque su contundente escrito llega después de que varios programas de la cadena -entre ellos el propio Deluxe o Socialité- hablaran de una supuesta infidelidad de ella hacia Santi Burgoa, motivo por el cual se habría roto la relación entre ambos, y solo tres días después de que la modelo acusara a la dirección de Sábado Deluxe de hacerle una “encerrona” durante el polígrafo de su madre, Lucía Pariente, que accedió a responder a varias preguntas de la vida personal de su hija sin que ésta, a priori, lo supiera, provocando que la modelo pusiera por ello el grito en el cielo.
“A mí me cae muy bien, pero Alba está entrando por unos derroteros muy complicados. No sólo aquí, sino también en La casa de los secretos. Está cruzando varias líneas rojas hasta que un día, otra vez, alguien dirá 'hasta aquí' y estará una temporada fuera”, dijo Jorge Javier Vázquez esa misma noche, que acabó con Carrillo insultando por los pasillos al equipo del programa y abandonando antes de tiempo las instalaciones de Mediaset entre lágrimas, según la versión del propio formato.
Aunque la tertuliana de Sálvame y Secret Story no hace mención a estos hechos a lo largo de su carta, sí defiende que lo sufrido en las últimas semanas “se ha hecho de una manera deliberada con el propósito de atentar contra mi honor, dignidad y reputación”. De hecho, denuncia que está recibiendo “comentarios, insultos y amenazas irreproducibles por su gravedad”. “Todos ellos”, según sus palabras, “fomentados y alimentados por la falta de honestidad, rigor y dignidad de estos programas de televisión”. De ahí que haya tomado acciones legales “para frenar lo que considero algo de extrema gravedad” y se haya comprometido a ir hasta el final de este asunto para “exigir rectificaciones inmediatas y urgentes a los responsables de estos espacios”.
“Hay unos límites que deben respetarse”
En su extenso comunicado, Alba Carrillo también expone su “absoluto rechazo a aquellos trabajadores de los medios de comunicación que se vanaglorian a través del morbo, del daño, del destrozo basado en la falsedad, en la calumnia y en la mentira para herir y dañar a las personas con la única meta de poder arañar unos dígitos más de audiencia en sus espacios”. Además, aboga “por una televisión basada en la verdad y en la autenticidad” y defiende una prensa del corazón “sustentada en la confirmación y en la certeza como pilares fundamentales”.
“No todo vale en estos formatos que algunos están exprimiendo hasta la asfixia de sus personajes y protagonistas” ni en un modelo de televisión “que unos pocos están destruyendo a gran rapidez y del que, los que trabajamos en él, no queremos que sea engullido por las nuevas alternativas y plataformas digitales”, añade la televisiva, que en su escrito reitera que “hay unos límites que deben respetarse”.
“No se puede permitir que nos muestren o nos hagan creer, por un lado, su denuncia, su rechazo y su disconformidad contra todo lo que atenta contra las mujeres, enarbolando la bandera del feminismo, y de forma paralela, actúen promoviendo y potenciando, en varios de estos espacios, el odio y el rechazo hacia la mujer en virtud de la mentira”, expone antes de lamentar que haya “muy pocos profesionales” que puedan presumir de “la verdad la ética, la responsabilidad y el juego limpio”. Valores que, según ella, brillan por su ausencia en favor de programas que, “de forma premeditada”, se erigen en “instigadores, cómplices y agitadores de feroces ataques a determinadas personas por mostrarse, en ocasiones, más indefensas o vulnerables”.