TardeAR tuvo una tertulia VIP cuando menos intensa este martes 19 de noviembre. Ana Rosa Quintana tuvo dos grandes ejes: uno fue la visita de Manu Tenorio, a quien la presentadora apoyó públicamente en su conflicto con sus inquilinos, en la que se compró sin dudas su versión de los hechos; el otro, la aparición conjunta de Álvaro Muñoz Escassi y Sheila Casas, ambos colaboradores del magacín, tras los múltiples rumores de un noviazgo que ambos quisieron confirmar.
Lo cierto que Quintana quiso enfatizar el hecho de que el exjinete y la abogada son “la pareja de moda”, habida cuenta del interés despertado por su relación. “Dicen algunos 'somos amigos'; dicen otros 'el primer romance surgido aquí, en la tertulia VIP'. Vamos a ver cómo surge el amor, la atracción, la amistad o como ellos quieran llamarlo”, comentaba la presentadora al introducir el tema en la tertulia. “¡Vamos a lo que vamos!”, exclamó Beatriz Archidona, mientras el resto
Fue Casas quien tomaba la palabra en un primer momento y aseguraba que ella y él son “grandes amigos”: “Para mí ha sido un descubrimiento. Ahí donde lo veis, con la fama que tiene, como persona es amable, divertido, trata a la gente en la calle maravillosamente bien... Pero como amigo”.
Sin embargo, tanto Ana Rosa como Xavier Sardá metieron cizaña tratando de lograr una confesión: “¿Has dónde has descubierto [de Escassi]?”, preguntaba ella. Cuando Casas respondía que se “reían continuamente” juntos, Sardá infería de las palabras de Casas: “O sea, cuando hacéis un polvo, os reís”. Escassi entonces pidió a realización que pusieran de fondo Hoy quiero confesar, de Isabel Pantoja, lo que daba alas al resto de contertulios a pensar en una declaración: “Está muy pillado”, decía Boris Izaguirre.
“Muy tonto tengo que ser para no estar enamorado”
El jinete terminó realizando ambiguo discurso de afecto: “Nosotros somos amigos de compartir cosas, de vernos... Hablando en serio: obviamente muy tonto tengo que ser para no estar enamorado de esta mujer, muy tonto. Pero tanto yo como cualquiera. Cualquier persona se puede enamorar de esta mujer, es maravillosa, no hay más que verla. Pero ante todo somos amigos, para mí es una grandísima putada. Nos lo pasamos muy bien. Os vais a hartar de vernos juntos porque estamos mucho tiempo juntos”.
“¡Se acaba de declarar!”, proclamó Ana Rosa, mientras él negaba que fuera así. Ambos insistían en rechazar “etiquetas” sobre su relación, aunque no impidió las bromas a costa del historial amoroso del exjinete, que tanto ha dado que hablar en verano. Así, Ana Rosa insinuó que su colaborador estaba cuidándose mucho de no cometer imprudencias: “Los hermanos Casas te tienen acojonado”.
“La gente que me conoce no tiene el mismo concepto [de mí] que la que no me conoce. Dejadme respirar un poquito”, terminó pidiendo él. Eso sí, a Sardá no le convencieron estas explicaciones: “Se creen que somos tontos”, dijo, chupándose simbólicamente el dedo.