'MasterChef Celebrity' vivió “la noche de Celia” y su expulsión más tardía con lluvia de halagos
MasterChef Celebrity 5 emitió este martes su novena gala en La 1 de TVE, enfilando ya su recta final que llegará en la duodécima noche que, si no hay cambios, se producirá el próximo martes 8 de diciembre. Se trató de una cita con especial nocturnidad, puesto que al arrancar después del fútbol, su final se produjo en torno a las 1:45 horas de la madrugada.
Fue una gala en la que los ocho aspirantes restantes demostraron un nivel que agradó a los jueces y a los cocineros invitados. Y que pese a ello, acabó con la expulsión de Gonzalo Miró por ser el que menos convenció a los tres jueces, despidiéndose orgulloso por su papel y dejando claro que su “pique” con Florentino Fernández era profunda amistad.
“La noche de Celia”, con delantal dorado y mayoría absoluta
La primera prueba empezó con una petición de matrimonio de Flosie a Pepe Rodríguez, que volvió a ser criticada en las redes sociales acusando de homofobia al cómico, a pesar que el propio Josie aclaró en su entrevista con Vertele lo que opinaba sobre el personaje de su compañero.
Líos a parte, la prueba tenía el premio más deseado por todos: el delantal dorado, que convertía a su ganador en finalista. Con Boris Izaguirre como invitado y “azafata”, el programa presentó un bingo de ingredientes y elaboraciones con premios por cantar línea (dos ingredientes extras del mercado) y bingo (poder acceder al mercado en todo momento). Y ambos premios los cantó Celia Villalobos, en lo que fue el principio de “su noche”.
Todos los aspirantes tenían que hacer un plato con los ingredientes y elaboraciones que antes de acabar el bingo hubiesen “tachado” de su cartón, con el aliciente de que los catadores iban a ser dos amigos de cada uno de ellos (entre ellos Máximo Huerta, Asier Etxeandia, Josema Yuste, el diputado Borja Cabezón, Sara Escudero o Juanma Castaño). Ha habido un momentazo televisivo, destacado por Juanma Castaño, cuando Villalobos ha visto a Huerta y se han fundido en un abrazo: “¡Mira, dos exministros! ¡Esto es la hostia macho! ¡Esto es historia de MasterChef!”, ha dicho el periodista deportivo, a lo que Boris ha añadido: “¡Viva la socialdemocracia!”.
Todos los invitados votaban al final por el mejor plato, y demostraban que la ganadora del bingo había sabido usar muy bien su ventaja: 6 votos para Celia Villalobos, 1 para Gonzalo Miró (con dudas por si Boris había “influido” en el voto) y 1 para Josie. El delantal dorado, para la exministra del PP.
Éxito y enhorabuena en exteriores desde La Rambla
La prueba de exteriores en plena Rambla de Barcelona se convirtió en un homenaje a las víctimas del terrorismo, con un simbolismo especial para Jordi Cruz por estar en su ciudad.
Villalobos, como la triunfadora de la primera prueba, pudo repartir a los equipos, quedándose con Raquel Meroño, Ainhoa Arteta y Florentino Fernández, para enfado de la Terremoto que se “conformó” con compartir equipo con Gonzalo Miró, Nicolás Coronado y Josie.
Fue una prueba con muchas visitas. Los cocineros catalanes Oriol Castro, Mateu Casañas y Eduard Xatruch elaboraron un menú y los dos primeros se convirtieron además en capitanes de cada equipo, que además recibieron el apoyo de los exparticipantes de MasterChef Luna y Alberto (que eligió Villalobos para su equipo).
Los aspirantes pudieron probar la dureza de los cocineros profesionales y su altísimo nivel de exigencia. Y pese al cachondeo por llamar “Flor” a Florentino, y las broncas a Terre y Josie por dedicarse a hablar, lo cierto es que todos acabaron sorprendiendo a los chef y recibiendo las felicitaciones del jurado.
Pepe Rodríguez valoró a “su” equipo rojo felicitando a Gonzalo Miró y Nicolás Coronado, y tirando de las Terre y Josie. Por su parte, Jordi Cruz se ha dirigido a “su” equipo azul simplemente para felicitarles, tanto a Raquel Meroño, como a Celia Villalobos, Ainhoa Arteta y Florentino Fernández. Y de hecho, ha querido dar a los ocho la enhorabuena y felicidades, calificando la prueba como “un éxito”.
Pero como ha dicho Pepe Rodríguez, sólo podía ganar uno, y fue el equipo azul de Celia Villalobos, Ainhoa Arteta y Florentino Fernández, destacando especialmente a Raquel Meroño y reconociéndola como la mejor, valorando su actitud y aprendizaje.
Adiós a Gonzalo Miró entre halagos generales de los jueces
Con Gonzalo Miró, Nicolás Coronado, la Terremoto y Josie (otra vez en el foso) en el alambre, la prueba de eliminación sorprendió con una caja misteriosa que, al levantarse, tenía peta-zetas, kikos y café. Tras hacer pasar a la invitada Lolita Flores (que una y otra vez recibió las invitaciones de Jordi Cruz y Pepe Rodríguez para participar en la próxima edición), los jueces explicaron que la prueba consistía en hacer varios tipos de bombones y trufas, originales y atrevidos. Algo que provocó pánico en los concursantes.
Pero nuevamente, volvieron a demostrar el nivel adquirido y a sorprender al jurado. Nicolás Coronado se llevó sólo elogios, hasta el punto de que Jordi Cruz le nombró su “caballito ganador”. La Terremoto volvió a encandilar especialmente a Pepe Rodríguez. Josie se llevó piropos como “yo creo que vas a acabar siendo cocinero” de Samantha y “eres virtuoso” de Pepe Rodríguez. Y con Gonzalo Miró, pese a alabarle que fue el único que se atrevió con el chocolate blanco, mostraron más dudas y mostraron cómo se le habían desecho.
Tras la deliberación, la decisión fue la esperada. Primero los jueces quisieron destacar a la Terremoto, pidiéndola que subiese a la galería ya salvada. Y luego, tras explicar a Gonzalo Miró, Nicolás Coronado y Josie en qué habían fallado, anunciaron lo previsible: Gonzalo Miró fue el expulsado.
Durante su despedida su peculiar “pique” constante con Florentino Fernández se demostró como una prueba de su profunda amistad, puesto que el cómico bajó a abrazarle y despedirle y se emocionó. Y ya sentado en el sofá con Pepe Rodríguez, el prolífico colaborador televisivo aseguró que quiere que gane MasterChef Celebrity 5 el propio Florentino, y que se enfrente a la final su también amiga Ainhoa Arteta.