La periodista y el cámara de À Punt que fueron agredidos por algunas de las personas que se manifestaban frente a la sede del PSOE de Valencia han puesto los hechos en conocimiento de la Fiscalía.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo 12 de noviembre mientras informaban de la protesta que se estaba llevando a cabo contra la amnistía pactada entre el PSOE y los independentistas catalanes.
Algunos de los asistentes lanzaron botes de cerveza contra el equipo de la televisión pública valenciana, que se encontraba realizando una conexión en directo. También intentaron tapar la cámara con banderas de España, hicieron una peineta y empujaron a los profesionales repetidamente. Es decir, los reporteros de À Punt fueron víctimas de un acoso similar al que están sufriendo otros medios de comunicación desde que empezaron a celebrarse estas manifestaciones a las que acude un amplio espectro de la derecha política.
Organizaciones profesionales, partidos políticos y representantes de la sociedad civil han condenado la agresión. Desde la Unió de Periodistes Valencians lamentan la actitud de los manifestantes: “El derecho legítimo a la protesta nunca puede impedir el derecho a informar”, defienden al mostrar “todo” su apoyo a los trabajadores.
Por su parte, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, subrayó, a través de su perfil de X, que “el respeto a los medios de comunicación y a los profesionales que trabajan en ellos es condición esencial de nuestra democracia”. Así, mostró su “firme condena” ante estos hechos y ha trasladado su “cariño” al equipo de À Punt y a un cámara de Antena 3 que “han sufrido la intolerancia de unos pocos”.
También el secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, y el síndic de Compromís, Joan Baldoví, expresaron su solidaridad con los trabajadores agredidos. Desde los partidos políticos, el PSPV-PSOE mostró su apoyo a la periodista de À Punt y “a todos los medios de comunicación que están siendo agredidos por hacer su trabajo”. “Los silencios cómplices y los discursos envenenados del PP nos llevan a esto: hordas de violentos en las calles que van contra la democracia”, censuraron los socialistas.
Compromís trasladó su apoyo a la periodista y el cámara con su “más firme condena a este nuevo ataque ultra contra el derecho a la información”. Por su parte, Vox Valencia también condenó “a quienes han tratado de impedir el trabajo de la prensa en la concentración” y defendieron “el respeto a los medios de comunicación y la movilización pacífica contra el golpe de Sánchez”.
Por otro lado, el Consell d'Informatius d'À Punt emitió un comunicado para condenar “de manera firme y categórica” las agresiones “fascistas, físicas y verbales”. Asimismo, denunciaron “la actitud intolerable de la ultraderecha concentrada en las sedes socialistas que, durante toda la semana, se ha creído con la impunidad necesaria para lanzar todo tipo de amenazas y coacciones a los diversos equipos que han informado”.
“La labor informativa es un servicio esencial protegido por la Constitución y el ordenamiento jurídico. Como periodistas y trabajadores de un medio público, continuaremos informando de todo aquello que consideremos relevante, con rigor y transparencia”, sostuvieron desde la entidad. “Ni nos acobardaremos ni toleraremos más ataques de aquellos que solo entienden el lenguaje de la violencia”.
En esta línea, resaltaron que, “en un momento en el que la prensa está constantemente sometida al cuestionamiento por parte de quienes no aceptan la diversidad de opiniones”, reivindican la labor informativa como “garante de las libertades individuales y colectivas”. “El fascismo tiene muchas caras. La aversión a la libertad de expresión es una y contra ella siempre será beligerante este Consell d'Informatius”, concluyeron.
A su vez, el Consell Rector i la Direcció d'À Punt condenaron el ataque sufrido por los profesionales, a quienes se impidió realizar “en condiciones” el directo “para que no contaran lo que estaba pasando”. “El directo no ha podido finalizar ante la presión y los empujones al equipo de la cadena pública por parte de algunos manifestantes”, lamentaron desde el consejo, al tiempo que han trasladado su apoyo a los trabajadores y han recalcado que “el derecho a informar libremente por parte de todos los medios de comunicación se debe combinar con el derecho de manifestación y protesta”.