'Supervivientes' deja sin pelo (por error) a Albert, expulsa a Colate y se interesa poco por Violeta
Jorge Javier Vázquez arrancaba la décima gala de Supervivientes 2019 comunicando que “se acerca la final”.
Con la expulsión de Colate, solo quedaron seis concursantes en la isla de los que Albert y Mónica están nominados y Dakota se unió a la lista como castigo de la organización por “su continua desobediencia”.
Además, la entrega anunció que viviría el regreso de Violeta tras haberse tenido que marchar por motivos de salud pero su entrevista tuvo poco más de dos preguntas.
Albert y Mónica, contra todo el grupo de Isabel Pantoja
Albert había pasado una semana mala con la baja de Colate, la ignorancia del resto de compañeros y el corte de pelo que le hicieron por error. Después de haber aceptado raparse en el juego de tentaciones, el programa le acabó de cortar pero pasándose más de la cuenta y dejando al viceverso casi al cero.
En la palapa, el concursante aseguró que sus lágrimas no eran por el corte, sino por la mala convivencia que estaba teniendo. Hasta que la organización le dio el pollo que le debía y este lo quiso compartir con el resto de compañeros que comieron menos Isabel Pantoja, que sintió que no había sido totalmente “sincero” a la hora de ofrecérselo y se enzarzaron en una discusión en directo.
Al malestar se unió Mónica Hoyos que había descubierto que la tonadillera le había estado nominando mientras ella pensaba que eran amigas. Por lo que le llamó “sinvergüenza” y la trifulca aumentó el tono, demostrando los dos bandos que existen entre los concursantes: los que apoyan a Isabel y Albert y Mónica.
Al sentirse atacada Pantoja amenazó con marcharse y Albert aseguró que ya nadie le creía sus “huidas”, mientras que Mónica pidió al equipo que le dejaran hablar a solas con la cantante para arreglar sus diferencias.
Colate vuelve para marcharse
Colate, que había estado bajo supervisión médica desde la gala anterior, recibió el informe con los resultados y decidió regresar al concurso sumando uno más al bando en contra de la Pantoja. Pero por poco tiempo.
Él y Fabio eran los nominados de la semana y la audiencia decidió que fuera el empresario el siguiente desterrado: “Espero que gane Albert que es el mejor superviviente y el que más lo merece. Millones de gracias al equipo, he flipado con la producción y todos, ha sido una experiencia maravillosa y no la voy a olvidar en mi vida”, dijo antes de marcharse.
Al llegar junto a Chelo y Mahi, el público volvió a votarle para que fuera el expulsado definitivo y las dos mujeres siguieran sobreviviendo a solas.
Violeta y la entrevista gancho para 'MyHyV'
Aunque el programa anunció desde el inicio, a las 22:00 horas, que hablarían con Violeta por primera vez en plató, no fue hasta más allá de la 1:00 cuando la viceversa se sentó frente a Jorge Javier Vázquez.
La joven solo tuvo tiempo para ver un resumen de su paso por el concurso y hacer una breve reflexión sobre su marcha forzada - “tengo que pensar que esto es una mala buena suerte. Me fui siendo salvada por el público y me vengo con el billete para el año que viene”- porque el presentador la despachó rápidamente para sorpresa de muchos espectadores, ya que Violeta había sido una de las protagonistas de la edición.
Pero que, por otro lado, sirvió como gancho de su visita de mañana a Mujeres y Hombres y Viceversa (de la misma productora del reality) donde podrá explayarse y se reencontrará con Julen, su ex y al que dejó por Fabio, como mostraron en una promo.
El “reencuentro” de Mahi y Chelo con sus parejas
El programa también tuvo un regalo para las piratas olvidadas y dejó que tanto Mahi como Chelo se reencontraran con sus parejas.
El novio de la “costurera” viajó hasta Honduras para abrazar a su chica en mitad de una playa que el equipo había decorado cual gasolinera (donde ella trabajaba).
Mientras que Chelo pudo hablar vía telefónica con Marta: “Me enamoré de ti hace 29 años y quiero estar junto a ti lo que me quede de vida”, decía la concursante emocionada, tras confesar que la dura experiencia le estaba recordando cuánto quería a su mujer.
