Una semana después del récord histórico de Rosa López en El Desafío con la prueba de la apnea, en la que aguantó sumergida bajo el agua 4 minutos y 40 segundos, Mariló Montero intentó superar la marca de su compañera.
El reto era complicadísimo y la presentadora fue incapaz de contener la respiración tanto tiempo. Cuando llevaba 4 minutos y 8 segundos (más que la mayoría de los concursantes del programa), su coach le ordenó que saliera a flote.
Juandi Alcázar estaba comprobando a cada instante que Montero no corriera ningún peligro. Le pedía insistentemente que moviera los dedos de las manos, pero cuando se había superado la barrera de los 4 minutos, el especialista entendió que era peligroso continuar.
“Saca la cabeza. Mariló, hazme caso. Saca la cabeza, por favor”, le dijo mientras la concursante apuraba unos últimos segundos que se hicieron eternos. Sin embargo, Alcázar se mostró implacable: “No discutas conmigo. Venga, salimos”, le ordenó estirando de su brazo para sacarla del agua. Tras recuperarse, la periodista, que ganó la máxima puntuación del jurado, rompió a llorar.