Museos para niños: diez propuestas curiosas y divertidas en las que aprender jugando
Los museos siempre nos enseñan cosas, pero esas cosas no siempre coinciden con los gustos de los más pequeños. Por lo que si viajamos con niños, y queremos que un museo sea capaz de aportarles conocimiento y entretenimiento, lo mejor es optar por uno que despierte su interés. De modo que, si quieres acertar, estos diez museos para niños que aquí te proponemos pueden ser justamente lo que andabas buscando.
Un buen museo para niños ha de ser divertido y los carteles deben indicar “Prohibido no tocar”. Ha de ser interactivo, dinámico y muy visual. Rico en contenido multimedia, participativo y práctico. Y, si no cumple con todos estos requisitos, al menos debe ofrecer una temática en la que los más pequeños se vean reflejados, recurriendo por ejemplo a elementos de su día a día. Cualquiera de los diez museos de los que te hablamos a continuación será capaz de ofrecer una visita didáctica y llamativa, y como verás no todos se han de centrar en la ciencia y la naturaleza, aunque esos siempre tengan el éxito garantizado entre los más jóvenes de la familia.
El Museo Jurásico de Asturias (MUJA), en Colunga
El MUJA es todo un espectáculo para los más pequeños. Cuenta con más de 8.000 fósiles, réplicas de diferentes yacimientos y varias recreaciones tanto en el interior como en el exterior del complejo. Ya que fue creado para ofrecer un centro de interpretación para la Costa de los Dinosaurios, un conjunto de yacimientos entre Gijón y Ribadesella, cuenta con una sección especialmente dedicada al jurásico asturiano. Cómo no, organiza talleres y actividades para niños.
Museo Valenciano del Juguete, en Alicante
El Museo Valenciano del Juguete está en Ibi, Alicante, y esta localidad cuenta con una larga tradición juguetera. De hecho, está ubicado en las instalaciones de la mítica fábrica de los Hermanos Payá, donde todavía se conserva maquinaria, útiles y herramientas con los que se fabricaron los primeros juguetes desde 1902. Aunque es más expositivo que interactivo, comparar los juguetes de antes con los de ahora puede ser de gran interés para los visitantes más pequeños. Hay piezas incluso de principios del siglo pasado y también traídas de otros países.
Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN), en Madrid
El MNCN es un plan infalible si viajamos con niños. Es uno de los institutos de investigación científica más importantes del país y además es uno de los Museos de historia natural más antiguos del mundo. En él hay prácticamente de todo, desde salas de minerales hasta otras que tratan la evolución humana, dándole un especial protagonismo a la biodiversidad. Además de que la temática natural ya es de especial interés para los más pequeños, el museo ofrece multitud de actividades didácticas e interactivas con las que el aprendizaje es aún más ameno.
Museo de las Ciencias Príncipe Felipe, en Valencia
El Museo de las Ciencias Príncipe Felipe es uno de los espacios que conforman la Ciutat de les Arts i les Ciències de Valencia y en él se dedican 26.000 m2 a la cultura científica. A lo largo de nuestra visita, tanto mayores como pequeños van a aprender sobre ciencia y tecnología de una forma didáctica y amena, siempre desde la diversión y el entretenimiento, pero sin olvidar nunca el rigor científico. Además de la exposición permanente de sus diferentes salas, ofrece multitud de actividades complementarias a lo largo del año para toda la familia.
Parque de las Ciencias de Andalucía, en Granada
El Parque de las Ciencias de Granada es uno de los museos más visitados de Andalucía y ofrece actividades y exposiciones para todos los públicos. Además de la exposición permanente, que pone la ciencia al alcance de la mano y de forma amena, ofrece multitud de talleres didácticos dirigidos a todas las edades y que tocan temas tan diversos como el cuerpo humano, la astronomía, la física, los virus, la maquinaria de vapor o la controvertida relación entre la robótica y la ética.
Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología, en Las Palmas
El Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología se encuentra en pleno centro de Las Palmas de Gran Canaria y su nombre proviene de la antigua naviera británica Elder DempsterLines Ltd., cuyo edificio ocupa ahora. Es un lugar en el que disfrutar de la ciencia en vivo y en directo, donde conocer la energía, el transporte, el espacio, la producción industrial y las nuevas tecnologías a través de multitud de módulos interactivos, un planetario, salas de talleres, un invernadero con ecosistemas de Canarias y una sala especialmente pensada para los niños.
Museo Pedagógico y del niño Castilla la Mancha, en Albacete
El Museo Pedagógico y del Niño de Castilla-La Mancha fue creado en 1987 por el maestro Juan Peralta con la finalidad de rescatar, conservar y difundir el patrimonio histórico de la infancia y su desarrollo a través del juego. Es un lugar para que los más mayores recuerden su infancia, pero también ideal para que los niños conozcan cómo era el mundo en torno a ellos décadas atrás y puedan compararlo con su actualidad a través de juguetes, enseres de la casa, tebeos o marionetas. Desde antiguos caballitos de madera hasta los primeros coches, dando un buen repaso además al mundo de la escuela y la enseñanza.
Museo del Fuego y de los Bomberos, en Zaragoza
Algo tienen los bomberos que atraen poderosamente la atención de los niños desde la más temprana edad. Por lo que… ¿Acaso no suena atractivo visitar el Museo del Fuego y los Bomberos de Zaragoza? Aquí aprenderemos sobre la labor de los bomberos y los medios que utilizan en su trabajo, repasando los objetos y vehículos empleados a lo largo de las últimas décadas. El personal del museo está formado por bomberos y siguiendo sus indicaciones daremos un paseo por salas que hablan de casos de emergencia con maquetas, el fuego, el salvamento, la extinción, las bombas de agua, los vehículos y la historia de los bomberos de Zaragoza. El museo se ubica en el Convento de Mínimos de la Victoria, del siglo XVII, y el propio edificio tiene también un gran protagonismo.
Eureka! Zientzia Museoa, en Donostia-San Sebastian
Eureka! Zientzia Museoa es justo lo que un museo de ciencia ha de ser si quiere ser útil e interesante para los niños: un lugar interactivo donde la información se ofrece de forma atractiva, con una comunicación basada en la manipulación de objetos y la realización de experimentos. Es, en definitiva, un centro de divulgación científica accesible a todas las edades. Un proyecto de Kutxa Fundazioa que además de repartir distintos ámbitos de la ciencia en ocho salas temáticas ofrece naturaleza, simuladores, robótica y un planetario digital.
CosmoCaixa, en Barcelona
En el CosmoCaixa, de la Fundación La Caixa, son expertos a la hora de ofrecer la ciencia de forma divertida y amena. Es un museo lleno de vida en el que se organizan multitud de talleres y actividades dirigidas a niños de todas las edades. Astronomía, ciencias de la naturaleza, matemáticas, medio ambiente, tecnología… Todo tiene cabida en las diferentes salas del museo, hasta un bosque inundado que nos traslada a la selva amazónica. Cómo no, su planetario es uno de sus principales atractivos, así como la sala universo, donde se nos explica el cosmos y su evolución desde el Big Bang hasta nuestros días.