El comodín Andalucía del PP: de las declaraciones de Gallardón a los “niños analfabetos” de Mato

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ante una pregunta sobre la reforma de la ley del aborto, respondió a Elena Valenciano (PSOE) en el Congreso de los Diputados, con lo que podría llamarse el “comodín Andalucía”, un argumento recurrente de respuesta del Partido Popular: “usted quiere para Europa una tasa de paro del 35 por ciento, un fracaso escolar como el de Andalucía o que Europa tenga un sistema de expedientes de regulación de empleo (ERE) falsos, que es lo que caracteriza y define a Andalucía”.

El PSOE andaluz se apresuró a asegurar que este era “un insulto sin precedentes”, aunque en este caso están equivocados.

De hecho, hace apenas unas semanas el gallego Feijoó pronunció la siguiente frase: “La Transición española se completará cuando en Andalucía gobierne un partido distinto al que ha gobernado siempre”

Y no hace tanto tiempo que Rafael Hernando, diputado del PP por Almería, aseguraba que “Andalucía era como Etiopía”.

El PP andaluz, en pleno proceso de renovación y de dar una nueva imagen, también salió rápidamente al paso a rectificar y matizar las palabras de Gallardón asegurando que no se refería a Andalucía en su conjunto sino a la gestión del PSOE andaluz. Y salió al paso matizando porque estas declaraciones no le benefician y porque no es la primera vez que el PP nacional se lo pone difícil a los populares en la comunidad andaluza poniendo a la región como ejemplo de todo lo peor, en virtud del gobierno socialista de los últimos 30 años.

La lista de declaraciones del PP sobre Andalucía toca todos los ámbitos y se remonta a una relación dialéctica de años:

Las “pitas, pitas” de Esperanza Aguirre en 2010, a propósito de la decisión del Gobierno de reducir a un mínimo histórico las jornadas que tienen que trabajar los agricultores para recibir el subsidio de desempleo.

Montserrat Nebrera, diputada por el Partido Popular por Cataluña, en 2009, aparte de denominar “cosa” a la entonces ministra de Fomento Magdalena Álvarez, aludió a su acento andaluz como “de chiste”. Acento que también fue objeto de mofa en la cámara de Madrid en relación a Trinidad Jiménez cuando era candidata a la comunidad de Madrid: “Es floja, le falta cuajo y su acento la hace más apta para Dos Hermanas o Vélez-Málaga”, palabras de Juan Soler, portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Madrid. Aunque en esta ocasión, el PP obligó a pedir perdón y rectificar sus palabras.

Ana Mato, actual ministra de Sanidad, que aseguró en 2008 que “los niños andaluces son prácticamente analfabetos”. Pidió disculpas pero repitió discurso en 2011, en plena campaña electoral, afrimando que “los niños andaluces dan clase en el suelo”.

El Estatuto de Autonomía andaluz en 2006 también se convirtió en una buena ocasión para pronunciar frases poco afortunadas sobre la región.

Ahí están las palabras del eurodiputado del pp catalán Alejo Vidal-Cuadras que se refirió a Blas Infante, considerado como padre de la patria andaluza, como “cretino integral” o las de Jaime Mayor Oreja, convencido de que el nuevo Estatuto de autonomía afianzaría el islamismo. Como “Chirigota” describió esta realidad nacional María San Gil y Mariano Rajoy aseguró que le sonaba a “cachondeo”.