Una joven árbitra gaditana se rebela contra insultos machistas
“No van a acabar con mi ilusión”. Lo afirma con pleno convencimiento Andrea Zarzuela, una joven árbitra de El Puerto de Santa María que el pasado fin de semana vivió una situación delicada en el partido Comarca de Jerez-Bornense Atlético, de la 4ª Andaluza juvenil.
El partido se jugó en la pedanía jerezana de San Isidro del Guadalete y Andrea era una de las asistentes del árbitro principal, que en este caso era Abel Bayard. En otras ocasiones es ella la que dirige el partido, pero en esta jornada había sido designada como juez de línea junto a su compañera Natalia Torres.
Andrea Zarzuela ha denunciado los insultos y amenazas que sufrió en ese partido de los padres de uno de los jugadores del Comarca de Jerez, aunque ella remarca en todo momento que el propio futbolista acudió en varias ocasiones para pedir a sus padres que dejaran de insultarla.
“El padre fue el que empezó porque me reclamó cuatro fueras de juego. Dijo que yo no tenía ni puta idea porque era mujer. Hasta el minuto 30 del primero tiempo estuve escuchando lo mismo, que me fuera a fregar. Le dije al delegado de campo que lo echaran de ahí y se puso todavía peor cuando le dijeron que si quería seguir en el campo tenía que dejar de decirme cosas. En ese momento empezó a decirme que era tonta y que no estaba a la altura de los jugadores”, recuerda con indignación.
“Al vestuario me fui con impotencia en el descanso, pero después ya no aguanté más. La mujer de ese señor también empezó a decir barbaridades y en el minuto 41 de la segunda parte le dije al árbitro que no podía continuar y se dio el partido por terminado. Me dijeron que me iban a hartar de palos al salir del vestuario”, relata.
No quiere volver
“En el vestuario estuve unos 25 minutos más o menos y cuando salí estuve mirando si quedaba alguien y pedí al delegado de campo que me acompañara al coche. Yo estaba aliviada y lo único que pensaba es que no quería volver a ese campo”, señala.
Han sido muchas las muestras de apoyo que ha recibido la portuense, pero la más significativa ha llegado del propio club Comarca de Jerez. El coordinador, Manuel López, afirma que “le hemos pedido disculpas a Andrea y hemos tomado la medida más drástica, que es la de prohibir la entrada a esas personas a todos nuestros partidos porque eso no puede ser. El hijo no tiene ninguna culpa porque además fue el primero que le pidió a sus padres que se callaran. Él sí les ha transmitido los valores de nuestro club porque al principio de cada temporada nos reunimos con todos los padres para pedirles que tengan un comportamiento deportivo”.
Andrea lo agradece, pero todavía tiene el susto en el cuerpo: “Ha sido la vez que más miedo he pasado. Este fin de semana pensaba tomármelo de calma, pero después de pensarlo he decidido volver a pitar. Voy a seguir hasta que pueda contra todo. Estoy acostumbrada a todo, pero tanto insulto machista era vergonzoso. No me va a condicionar porque yo quiero dedicarme a esto y le he dedicado muchas horas como para dejarlo ahora. Incluso me he operado de la rodilla y no lo voy a dejar por dos personas”.
El problema está, en su opinión, “en la falta de preparación de muchos padres, que quieren que sus hijos sean un Messi o un Cristiano y no se dan cuenta de que antes de ser jugador hay que ser persona”.