Jerez se revuelve contra un ataque homófobo: una concentración para dar visibilidad a una lacra social

Unas 300 personas se manifestaron este viernes en la Plaza del Arenal de Jerez de la Frontera (Cádiz) en defensa de la libertad sexual. Una concentración de repulsa y firme condena por la agresión sufrida por Emilio, un jerezano de 23 años que fue apaleado en la localidad gaditana el pasado fin de semana.

Los colectivos JereLesGay y Abrir Brecha convocaron una concentración de repulsa y firme condena contra la agresión homófoba sufrida por un joven la madrugada del domingo 30 de enero en las inmediaciones de una discoteca. Los organizadores defendieron que no quede “ni una agresión sin respuesta, porque no vamos a ceder ni un paso frente a la LGTBIQAP+fobia ni a la discafobia, y ni frente a cualquier ataque, insulto, humillación y atentado contra la dignidad de las personas”.

“Los hechos que pasaron el fin de semana son muy desagradables y dan fe del incremento de agresiones al colectivo LGTBI y lo polarizada que está la situación. No vamos a dejar pasar ninguna agresión y queremos mostrarle todo nuestro apoyo a Emilio. Queremos pedir la colaboración ciudadana porque hubo testigos de la agresión y agradeceríamos que esos desalmados fueran detenidos porque esto no es una agresión al uso, es un delito de odio”, afirmó Susana Domínguez, presidenta de JereLesGay.

Perder el miedo a denunciar este tipo de agresiones fue uno de los mensajes con mayor calado en esta concentración, donde se remarcó la necesidad de dar visibilidad a incidentes como el acaecido en Jerez. “Debe quedar claro que esto es una comunidad y que cuando agreden a una persona, nos agreden a todos. Los agresores son personas a las que les ha calado el discurso del odio y que sean detenidos debe servir para que no se vuelva a repetir. Tras saberse lo de Emilio han sido otras muchas personas las que han denunciado casos similares, nada puede quedar impune para que vivamos en una sociedad más segura y más justa”, señalaba Eduardo, miembro de JereLesGay.

El joven, de 23 años, fue agredido por varias personas que se bajaron de un coche cerca de una discoteca de la ciudad que es conocida porque acude un público que en su mayoría es LGTBI. Le gritaron “maricón de mierda” y empezaron a golpearle, causándole contusiones tanto en la cara como en el cuerpo.

“Un vertido tóxico en la sociedad”

Los colectivos presenten en el acto lamentaron que “las palabras que insultan y menosprecian la diversidad siguen calando como un vertido tóxico en la sociedad. La escalada de violencia, verbal y física, y la normalización del discurso de odio por parte de ciertas instituciones y medios de comunicación tiene consecuencias reales. Y la última consecuencia de este odio es el destrozo físico y mental de una persona que fue agredida por su discapacidad, su expresión de género y orientación sexual”.

“La normalización de la violencia hacia las personas diversas es insoportable. ¿Cuántas personas más tienen que ser agredidas y apaleadas para que se elimine y se prohíba cualquier discurso de odio? ¿Qué más tiene que suceder para que desde todos los estamentos sociales entendamos de una vez por todas que somos responsables de nuestras palabras, hechos y actitudes?”, se preguntaban los organizadores del acto.

La alcaldesa de Jerez, Mamen Sánchez (PSOE), estuvo presente junto a otros responsables políticos de la ciudad para mostrar su repulsa a la agresión y expresar su deseo de que la justicia sea implacable con los agresores: “Nuestra rotunda condena ante hechos de esta naturaleza y nuestra confianza en que ningún delito de odio quede sin castigo. Seguiremos apostando por la convivencia y el respeto a la diversidad. Denunciar siempre es fundamental para poder investigar e identificar a los autores”.