Francisco Reyes (Bedmar, Jaén, 1962) preside la Diputación de Jaén desde 2011. Una provincia que se sitúo a la cabeza del desempleo en España durante 2013. Aunque la tasa ha bajado durante este año, el desempleo y la dependencia del olivar amenazan con despoblar un territorio que ha invertido buena parte de sus esfuerzos en frenar la emigración.
Pregunta: ¿Cómo bregar con más de 65.000 parados en la provincia a la hora de definir políticas de empleo?
Respuesta: La Diputación Provincial, con la ley en la mano, no tiene competencias para crear empleo. Nos hemos implicado en este tema por las circunstancias que la gente está viviendo y por eso destinamos 35 millones de euros a crear empleo. Nuestra competencia es prestar apoyo en la recogida de basura, mejorar la calidad del agua, apoyar los servicios sociales o crear infraestructuras culturales. Pero somos conscientes del problema del empleo, por eso estamos apoyando a sectores como el turismo o el industrial. Lo llevamos mal y lamentamos no tener competencias y capacidad para hacer más cosas.
P: La Diputación está entrando en temas muy concretos como la apuesta por la diversificación agraria.
R: Sí, claro. El año pasado dedicamos 14 millones de euros a jornales. Hay casi 300 nuevos autónomos en la provincia con ayudas directas, de 3.000 euros, desde la Diputación; ayudas a cooperativas; hemos puesto en marcha un vivero de empresas en Geolit donde 25 empresas solo pagan el consumo telefónico; estamos apoyando el sector turístico en pequeños municipios; o la diversificación agraria, porque Jaén es olivar pero también otro tipo de cultivos. Todo ello creemos que ayuda a una provincia que ha hecho un gran esfuerzo en la diversificación económica (Jaén no es solamente olivar, también es madera, plástico, cerámica, servicios sociales…) pero esta crisis ha dañado mucho a sectores que eran muy pujantes.
P: Da la sensación de que cuando el desarrollo económico de Jaén empieza a coger carrerilla, algo lo para ¿Qué falta para que termine de despegar?
R: Jaén ha cambiado, pero todavía tenemos déficits históricos. Uno de ellos es el ferrocarril. Desde el punto de vista de las carreteras es necesario acabar el enlace con el Levante por la A-32; es necesario finalizar la autovía del olivar; es necesaria la conexión de la autovía Granada Badajoz por la Sierra Sur; y también, cuando sea posible, la autovía de El Carpio. Con eso se cierra la red principal de carreteras. Las comunicaciones son fundamentales y en ese sentido es necesario un esfuerzo por parte de todos. También tiene que haber una discriminación positiva por parte de los gobiernos con aquellos que peor lo estamos pasando. Mantener las ayudas al olivar, que han sido fundamentales en esta provincia para mantener la población en el territorio. En Jaén la reforma agraria está hecha, rara es la familia que no tiene un pedacito de olivar como renta complementaria. La gran ventaja que tenemos es que nuestros pueblos siguen habitados gracias a los servicios que se le prestan a los ciudadanos, gracias a las infraestructuras y gracias a la suma de ayudas al olivar, de las prestaciones del subsidio agrario y a los esfuerzos de puesta en valor de espacios naturales y de diversificación económica en sectores como el turismo, la mejora de la calidad en la agricultura o la garantía de unos servicios sociales de calidad.
P: Siguen habitados pero no crecen
R: Desgraciadamente no sólo en Jaén, en España, la población está descendiendo. Los extranjeros que rejuvenecieron la pirámide de población se están marchando a causa de la crisis y también se están yendo muchos jóvenes por falta de oportunidades. Es un hándicap duro para los próximos años. Por eso uno de los objetivos debe ser rejuvenecer el sector agrario, que está en manos de gente muy mayor. Necesitamos un sector agrícola joven, fuerte, con formación, con cualificación, que no tenemos.
P: ¿Por qué no existe? Siempre se ha dicho que el olivar es un gran potencial.
R: Cuando un joven ve las fatigas que pasa su padre en el campo, pendiente de si llueve o no, de si hay cosecha o no, lo que busca es estabilidad. Por eso la juventud no se ha incorporado al campo y ese es nuestro reto. En la agricultura se ha ganado mucho dinero y ha creado mucho empleo. Tenemos que hacer un esfuerzo por incorporar a los jóvenes. Nuestros pueblos están envejeciendo porque nuestros jóvenes universitarios se van para buscar oportunidades fuera. Pero en torno a la agricultura hay una oportunidad.
P: Pero se ha reivindicado una Facultad de Medicina y no una Escuela de Ingenieros Agrónomos.
R: Las necesidades de médicos no son las mismas. En cualquier pueblo hay dos o tres médicos pero no se necesitan dos o tres ingenieros agrónomos porque no hay espacio para todos. Hay que ver las necesidades y adaptar la formación.
P: Esta provincia se ha beneficiado mucho de fondos europeos que siguen sirviendo para actuar en zonas localizadas ¿Esas siguen siendo las zonas más necesitadas?
R: Los fondos europeos han venido a toda la provincia, a toda Andalucía y a toda España. Muchas veces parece que sentimos rubor por las ayudas, aquí recibe ayudas todo el mundo; el carbón, el automóvil... Parece que somos los únicos subvencionados y el AVE, que no llega a Jaén, se ha financiado con fondos europeos. España ha aprovechado los fondos y aquí en Jaén todas las comarcas han recibido, y determinados planes dedicados a comarcas “más deprimidas” los hemos orientado a las comarcas que lo necesitaban más.
P: ¿Y ha dado resultado?
R: Nuestro mérito es que la gente sigue viviendo aquí. No es porque sean masoquistas sino porque hay infraestructuras y servicios. En los últimos años, desgraciadamente, se están volviendo a marchar porque no hay oportunidades y ese es nuestro reto.
P: El turismo se presentó como una de esas oportunidades ¿ha sido lo que se esperaba?
R: El turismo no está llamado a ser la panacea, sino un sector con cada vez más peso. Ahora, en cualquier municipio hay un hotel, un pequeño restaurante, casas rurales… Y al final estamos hablando de dos o tres puestos de trabajo, pero en un pueblo de 500 habitantes eso es empleo: tres o cuatro personas trabajando en turismo, dos o tres en ayuda a domicilio, 20 en una residencia de mayores, la agricultura… Todo eso suma.
P: ¿Cómo imagina Jaén dentro de otros tres años?
R: Jaén tiene que pasar por el no conformismo, por poner más en valor los recursos y tenemos que conseguir esa discriminación positiva por parte de las administraciones. Jaén contó con un importante periodo de inversión de 2006 a 2011. Nunca antes se había licitado tanta obra pública. Esa discriminación es necesaria, porque si no tendremos problemas de despoblamiento. Un país que deja que su territorio se despueble no es un país solidario y crea diferencias.
P: Ha dicho administraciones ¿Está descontento con todas las partes?
R: No quiero echarle la culpa a nadie. Vivimos un momento de sequía absoluta por parte del Gobierno de España. La Junta de Andalucía podría hacer más, evidentemente, además de los planes de empleo, de los planes forestales o del plan OLA. Creo que es necesario un mayor esfuerzo. También de la Diputación. Lo que dedicamos a empleo se lo quitamos a los ayuntamientos de otras cosas, porque aquí todo lo que gestionamos viene de la Participación en los Impuestos del Estado. Que viene por ley, no por la generosidad de nadie. Cuando tenemos las tasas de desempleo que tenemos, lo que pedimos es un mayor esfuerzo y una mayor implicación.
P: Cambiamos de tercio ¿Le hubiera gustado que Susana Díaz concurriera a las primarias?
R: Yo creo que Susana Díaz ha hecho lo que debía. Sigue trabajando por Andalucía, su prioridad es Andalucía, aunque tenga un ojo puesto en lo que ocurra en Madrid, porque la de Andalucía es la federación que aporta el 25% de la militancia. Susana Díaz ha hecho lo que debía: cumplir su compromiso con los andaluces y las andaluzas, como dijo.
P: ¿Quién es su candidato?
R: Votaré a uno pero no lo voy a decir, por responsabilidad. No he avalado a nadie, votaré a un candidato pero el voto es individual y secreto, y no quiero influir, como secretario general, en el resto de la militancia de esta provincia.
P: ¿No ha sido un proceso un tanto vertiginoso? ¿De verdad les ha dado tiempo a reflexionar?
R: Es la primera vez en España que un partido va a elegir a su líder por el voto directo de sus militantes. No estaba previsto; estamos haciendo camino al andar. Yo creo que es un proceso ilusionante y está haciendo que haya más gente pendiente de este partido de lo que creemos. Hablamos de un partido que ha gobernado España durante más de 20 años y ha sido coprotagonista, con los ciudadanos, del cambio que ha vivido este país, de lo bueno y de lo menos bueno. El proceso está siendo distinto, porque nunca lo habíamos hecho, pero ilusionante.
P: Por los avales parece que ya hay un candidato que las tiene todas consigo.
R: Hay un dato objetivo: que Pedro Sánchez ha tenido más vales que Eduardo Madina o que José Antonio Pérez Tapias. Ahora hay que esperar a que hablen los militantes y ver qué candidato es el que hará más partido. El que gane en Madrid tendrá que ver qué se ha hecho en Andalucía y si lo hacemos igual, seguro que irá bien.
P: ¿Qué sensación da un proceso que por primera vez no está controlado por las distintas ejecutivas locales?
R: Es necesario hacer cosas nuevas, distintas, la transparencia, la participación, el partido va en esa línea y es lo que la gente quiere. Un modelo de partido ha funcionado y ha servido para todo este periodo de tiempo y ahora necesitamos adecuar nuestra organización a lo que está sucediendo en España y a lo que la sociedad está demandando. Cuando es el militante el que elige, directamente, es un avance importante. Está tan abierto que tenemos tres candidatos. Es verdad que uno tiene más avales que otros. Pero también es verdad que unos han ganado en unas comunidades autónomas y otros, en otras. Cada militante ha avalado a quien ha querido y, ahora, de forma individual y secreta, votará lo que cada uno quiere o la que crea que es la mejor opción.
P: ¿Va a haber sorpresas?
R: Va a haber lo que quieran los militantes ¿Sorpresa qué es? ¿Va a ganar el que más avales ha tenido? Será lo que los militantes quieran.