El exalcalde de Jerez de la Frontera (Cádiz), Pedro Pacheco, ha asegurado que la venta del solar de la antigua estación de autobuses estaba “santificada” por los concejales que integraban el consejo de administración de Emusujesa, el pleno y el interventor municipal. En el tercer día del juicio que acoge la Audiencia de Cádiz por el caso de la venta de la antigua estación, ha advertido de que “nunca interfirió hacia abajo” en las líneas del aparato “directivo” durante su gestión al frente del Ayuntamiento de Jerez de la Frontera durante más de 20 años, porque era el “responsable político” y tenía un equipo técnico “impresionante”.
Durante su declaración, que ha durado casi dos horas, se ha desvinculado de la elaboración de los informes de valoración y de venta de la finca que realizaron los técnicos en el proceso en los que tenía depositada su “total confianza”. En este sentido, ha insistido a las preguntas del fiscal, que ni “estaba capacitado, ni tenía tiempo” para dedicarse a esos procesos técnicos, porque en esa etapa -entre 2004 y 2006 y como delegado de política territorial en ambos pactos PP-PSA y PSOE-PSA- tenía a su cargo “400 actuaciones urbanísticas”.
Ha indicado que la finca “estaba perfectamente valorada” en 1.783.000 euros, puesto que haber encargado una nueva tasación al año siguiente para su venta “hubiera sido peor” para el Ayuntamiento de Jerez de la Frontera, porque “habría valido menos”, ya que “los bienes se deprecian como las personas”. Frente a las manifestaciones del exalcalde, la fiscalía mantiene en su escrito de acusación tras haber encargado un peritaje a la Agencia Tributaria, que el valor de dicha finca con una estación de 32 años se hubiera elevado al año siguiente a los 4,5 millones de euros.
Se publicitó por “el boca a boca”
Preguntado por la ausencia de los principios de publicidad y concurrencia, que recogen los estatutos de Emusujesa, para la venta de la parcela para promover un centro comercial de ocio, ha señalado que entiende que “venían dados” por las “notas de prensa” que se emitieron, el “boca a boca” y el folleto publicado por el Consorcio Ferroviario anunciando la construcción de la nueva estación.
El exregidor, que actualmente cumple una condena de cinco años y medio de prisión, ha dicho que “no sabe” por qué alguna de las ofertas presentadas iban a su nombre y ha recalcado que él “no recibía nada” y que llegaban a la extinta Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) y Emusujesa, que compartían el mismo edificio.
Igualmente, ha declarado que si el entonces gerente de Emusujesa -para el que el fiscal pide también siete años de prisión- se decantó por la oferta de Ingeniería Jienense era “porque sería la mejor”, pero ha negado que él previamente hubiera mantenido “contactos” con su administrador, Ángel Monereo, o que le comentara al exalto cargo municipal que “parecían gente seria”.
Ha reconocido que aunque “lo conocía”, en ese momento no mantenía amistad con el empresario José Luis López El Turronero, que también se sienta en el banquillo por esta presunta operación fraudulenta. Ha relatado que “hoy en día” sí es su amigo y como tal lo ha visitado en el “centro residencial de Puerto II” (o sea, la prisión donde cumple condena).
También ha admitido que cuando se cerró la operación de venta en abril de 2006 “no leyó” las escrituras, ya que “firmaba 25 en cinco minutos” y “no le correspondía y no tenía tiempo de revisar” un documento que estaba avalado por el gabinete jurídico del consistorio. El exalcalde, que durante el interrogatorio se ha levantado en un par de ocasiones para “estirar las piernas”, ha asegurado que “no le consta” que el mismo día en el que se firmaran las escrituras de la compra del solar el administrador único de Ingeniería Jienense vendiera una parte de la finca “a un tercero”. De hecho, ha negado “rotundamente” estar al tanto de que detrás de Ingeniería Jienense y las otras dos empresas estuviera El Turronero y su socio.
De los 2,7 millones de euros por los que Emusujesa vendió el solar de la antigua estación, ha dicho que el 90% se destinó a un consistorio “con ansias de cubrir su déficit de tesorería”. Es más, ha explicado que, tanto en la etapa de los gobiernos en coalición como el PP y el PSOE, había un interés “común” en “desprenderse” de “activos innecesarios” para cubrir el déficit de tesorería.
La vista se reanudará el próximo lunes con la declaración del resto de imputados, mientras que para el martes están citadas como testigos las exalcaldesas María José García-Pelayo (PP) y Pilar Sánchez (PSOE).