La otra mezquita de Córdoba
Quien viaja hasta Córdoba no deja de ver la Mezquita-Catedral, conocida internacionalmente como una joya arquitectónica e histórica de la época de Al-Andalus. Pero lo que pocos saben es que también en Córdoba, en su provincia, se levanta otra mezquita muy particular: la primera que se edificó para el culto musulmán en España después de más de siete siglos.
Este templo se ubica en la localidad de Pedro Abad, a unos cuarenta kilómetros de la capital y visible al paso de quienes viajan por la autovía de Andalucía A-4. Allí se levanta la mezquita que la comunidad musulmana Ahmadía -originaria de Pakistán e instalada desde 1946 en España- construyó a comienzos de la década de los pasados años 80. De hecho, esta mezquita es el centro de la comunidad Ahmadía en España, cuyo presidente es vecino de Pedro Abad, y lugar de celebración de su asamblea anual – la ‘Jalsa Salana’.
“Amor para todos, odio para nadie”. Esa es la leyenda que preside la entrada de esta mezquita, desconocida para muchos, y que sigue la doctrina musulmana de la comunidad Ahmadía. La estampa del edificio, obra del arquitecto cordobés José Luis Lope y López de Rego, sigue el estilo islamo-indú basado en el origen de la comunidad, con dos característicos minaretes en su muro frontal que son los que distinguen la imagen de este templo.
La hospitalidad define a esta comunidad musulmana que mantiene la mezquita abierta siempre tanto para el rezo de vecinos, de fieles llegados de otros puntos del país y de turistas que, bien paran allí para cumplir con la oración o bien visitan la mezquita por curiosidad. Hasta aquí llegan los fieles musulmanes de la comunidad de todo el país que suman medio millar de personas que se reúnen al menos una vez al año.
Pero, además, la mezquita es visitada por turistas: en grupos que llegan en autocar, en visitas particulares de musulmanes y también de quienes ven el edificio y se sienten a traídos por él para conocerlo de cerca. De igual manera, la comunidad está abierta a recibir visitas de escolares desde sus centros educativos para conocer este edificio con historia.
En el templo, de unos 500 metros cuadrados, el centro lo componen las salas de rezos: una para los varones y otra para las mujeres. Como es costumbre, cinco veces al día el imán de la mezquita realiza la llamada al rezo, al que acuden los fieles y donde también se leen suras del Corán, dirigiéndose siempre en dirección a La Meca. Cada viernes, además, escuchan el discurso que desde Londres pronuncia el Califa Supremo de la comunidad, seguido desde los distintos países donde están establecidos. “No hay más Dios que Alá y Mahoma es su Profeta”, es la leyenda que se puede leer en árabe en el frontal del mihrab, donde esta comunidad musulmana predica el Islam haciendo especial hincapié en que es una religión de paz.
Junto a las salas de rezo, la mezquita incluye distintas estancias, donde hombres y mujeres realizan por separado sus actividades, siguiendo las normas musulmanas: desde reuniones a actividades culturales o el comedor.
Y además, el edificio alberga una de las joyas de esta particular mezquita y una de las estancias más visitadas: la biblioteca. Abierta a cualquier persona, cuenta con ejemplares del Corán en más de 60 idiomas, además de otros libros sobre la historia del Islam y de la comunidad Ahmadía.
Una historia que en Pedro Abad tiene una vinculación especial, pues fue donde la comunidad quiso asentarse hace ya 34 años y levantar este particular edificio. Desde entonces, como espectadores privilegiados, los vecinos de este municipio son los anfitriones de quienes paran a visitar el templo, la otra gran mezquita cordobesa.