Los 'caminantes nórdicos' se extienden por Andalucía

Encontrar en una misma frase las palabras ‘nórdico’ y ‘Andalucía’ puede resultar chocante. Sin embargo, se trata de una combinación idónea. Y es que el nordic walking o marcha nórdicanordic walking encuentra en los senderos y montañas del sur un entorno inigualable para su práctica. Concretamente, en Santa Ana la Real, un pequeño municipio onubense de escasos quinientos habitantes que ha pasado a convertirse en el epicentro andaluz de este deporte.

Javier Ramos, monitor de nordic walking y fundador de Nordic Walking Sevilla, explica cuál es la clave de este deporte: “A diferencia de prácticas como el senderismo o el trekking, usamos los bastones de forma activa y no como simple apoyo”. Una sencilla técnica que moviliza el tronco superior, llegando a trabajar el 90% de la musculatura del cuerpo, y amortigua la sobrecarga de las articulaciones.

Su accesibilidad lo convierte en una práctica deportiva ideal para todo tipo de usuarios, desde experimentados deportistas que buscan en el nordic walking una actividad complementaria a sus entrenamientos, hasta personas que quieran iniciarse en el mundo del deporte de una forma amena.

Los múltiples beneficios psicofísicos de la marcha nórdica, unidos al gran atractivo turístico que supone el contacto con la naturaleza y el mundo rural, hacen de la marcha nórdica un deporte en pleno auge en España.

De un rincón de Andalucía a la capital

De un rincón de Andalucía a la capitalPero, ¿cómo llega un pueblecito de apenas medio millar de vecinos a convertirse en el ‘Primer pueblo Nordic Walking de Andalucía’?

Todo comenzó en 2011 con una apuesta del Patronato de Turismo de Huelva que, consciente de la importancia de este deporte en países centroeuropeos como Alemania, puso en marcha un programa de formación en esta especialidad. Javier, natural de Santa Ana, explica que esto supuso una revolución para el pueblo que, “al ser tan pequeño, de repente se vio con seis monitores de marcha nórdica”.

Desde entonces, el municipio serrano ha acogido ya tres ediciones consecutivas del Campeonato de Andalucía de Marcha Nórdica y en 2017 fue el anfitrión del I Campeonato de España de Marcha Nórdica. Tomando como referencia este núcleo andaluz el nordic se popularizó y dio el salto a Sevilla, donde sigue ganando adeptos cada temporada.

“Caminar es sólo el principio”

“Caminar es sólo el principio”Aunque –por el momento– no existen datos oficiales del número de aficionados a la marcha nórdica en Andalucía, cifras como las de Nordic Walking Sevilla pueden servir para dar una idea aproximada del potencial de esta nueva disciplina.

“Empezamos en 2015 con un grupo muy reducido de diez personas y en la actualidad tenemos ocho grupos, con un total de unas cien”, cuenta el director de esta empresa. Y destaca que los números no paran de crecer: “Entre cursos y campeonatos, durante el primer año participaron en nuestras actividades unas 500 personas; en 2016 superaron las mil”.

En vista de la buena acogida de la que ha gozado el nordic en tan poco tiempo, la capital andaluza acogió recientemente la I Marcha Nórdica Ciudad de Sevilla, un campeonato que contó con la participación de un centenar de deportistas.

La marcha nórdica fue reconocida por primera vez en España por la Federación Andaluza de Montañismo (FAM), una iniciativa que fue imitada por federaciones de otras Comunidades Autónomas. Y en 2016 obtuvo el reconocimiento oficial de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME) y el Consejo Superior de Deportes, lo que convierte al nordic walking en un deporte en toda regla.