El PP-A se resigna a una negociación de partidos a tres bandas
El PP-A ha dado este viernes el pistoletazo de salida para la precampaña de cara a las elecciones europeas con una reunión mantenida entre su presidente, Juan Manuel Moreno, y los ocho dirigentes provinciales, junto a varios miembros de la ejecutiva regional en Sevilla. Unas europeas que se toman “como unas autonómicas”, en palabras de la secretaria general del PP-A, Dolores López, dado que están “convencidos” de que habrá adelanto electoral en Andalucía, y fijan, de hecho, en “otoño” el momento en el que la presidenta de la comunidad autónoma, Susana Díaz, convocará los comicios “porque lleva tiempo con la mirada puesta en Ferraz y alejada de los intereses de Andalucía”. En su opinión, la también secretaria general del PSOE-A no quiere “dar tiempo a que los andaluces palpen los buenos resultados de las políticas de Mariano Rajoy” ni a que Juan Manuel Moreno “se dé a conocer más”, y por eso adelantará los comicios.
En este contexto, los populares han reculado en su cerrazón inicial y están dispuestos a negociar a tres bandas -es decir también con IU y no sólo con el PSOE-A “los grandes acuerdos” que necesita Andalucía, en temas como el empleo o la transparencia y la regeneración democrática. Eso sí, Dolores López ha insistido en que pretende que sean reuniones “de partido”, separándolas así del ámbito parlamentario. En este sentido, ha matizado que primero se tendrían que alcanzar acuerdos entre las tres formaciones y luego elevarlos a la Mesa de Partidos que constituyeron los tres grupos con representación en el Parlamento de Andalucía y que el PP-A abandonó el pasado mes de junio cuando se hablaba de transparencia. “Sí aceptaríamos reuniones con IU porque los comunistas se lo van a imponer a Susana Díaz”, ha dicho. En este sentido, ha reiterado que “IU tiene atada a Susana Díaz”, por lo que se resignan a negociar con la coalición de izquierdas, aunque el PP-A era partidario de que “sólo” se sentaran a hablar de estos asuntos “los dos partidos con opciones de gobernar en Andalucía”.
En cuanto a los interlocutores, ha precisado que por el PP-A será ella misma, y por el PSOE-A entiende que corresponde a su secretario de Organización, Juan Cornejo, del que todavía está esperando que le “devuelva la llamada” que le hizo por teléfono, “aunque sea por educación”. Luego, ha repetido, se pasaría a abordar lo acordado entre los grupos parlamentarios. Ése es al menos el esquema que los populares entienden que debe darse dentro del empeño que dicen tener por recuperar el diálogo y por una oposición constructiva una vez solucionado su problema de liderazgo.
La número 2 del PP-A ha querido hablar también del auto de la jueza Mercedes Alaya en el que fijó una fianza de responsabilidad civil superior a los 29 millones de euros para la exministra y exconsejera Magdalena Álvarez, imputada en la investigación de los expedientes de regulación de empleo (ERE) fraudulentos de la Junta de Andalucía. No van a pedir su dimisión “porque sería una frivolidad y el PP siempre ha respetado la justicia”, en referencia a que todavía no se ha demostrado su culpabilidad y, según ha precisado, porque “ya no tiene responsabilidades de gobierno”, cosa que sí ha puntualizado que ostenta el vicepresidente de Andalucía, Diego Valderas, para justificar así que en su caso sí pidieran la renuncia pese a que ni siquiera está imputado. En todo caso, le han pedido a la exministra que “reflexione” sobre su responsabilidad en el “entramado jurídico” que, según los populares, posibilitó la corrupción con los ERE. También ha aprovechado para exigir que “Susana Díaz pida perdón” por los “ataques de los suyos” a la jueza que lleva el caso, y que ha sugerido que “salen de los despachos de San Telmo”.
También en este sentido se ha pronunciado el consejero de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, Emilio de Llera, quien se ha mostrado seguro de que la exresponsable de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía entre 1994 y 2004 debe seguir ostentando su cargo como vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), habida cuenta de que “hasta que no es declarada culpable debe presumirse su inocencia”.